Según ha explicado, a preguntas de los medios, han pedido esta reunión al arzobispo porque han visto «preocupación» en la iglesia ante «algunas cuestiones puestas sobre el papel respecto a cómo se iban a materializar los presupuestos en cuanto a la prestación de servicios religiosos».
«El debate que le quiero poner sobre la mesa es el de la financiación pública. Nuestra Constitución es muy clara, y dice que todos somos iguales y no podemos ser discriminados por razones de credo», ha dicho García Molina.
De su lado, el secretario general de CCOO en la región, José Luis Gil, presente en la misma rueda de prensa celebrada tras una reunión entre ambas organizaciones, ha querido saludar esta propuesta. «Felicito esta iniciativa, porque no es admisible esa partida presupuestaria», ha enfatizado.