El centro educativo asegura que no ha recibido ninguna queja, pero se muestra dispuesta a retirarlo
La imagen de un Cristo crucificado hiere muchas sensibilidades y es la raíz de un conflicto enquistado que resurge de cuando en cuando en este país. Ayer mismo, sin ir más lejos, Día Internacional del Laicismo y de la Libertad de Conciencia, la Asociación Asturias Laica denunció la presencia de un crucifijo en un centro educativo público gijonés: el IES Jovellanos.
Según explicó la organización, al Observatorio de la Laicidad y a Asturias Laica llegó recientemente la fotografía tomada por un padre en el instituto de Educación Secundaria. En concreto, una imagen «tomada desde la ventanilla de atención al público de la Secretaría» del centro y en la que se aprecia un crucifijo de generosas dimensiones sobre el dintel de una puerta. O lo que es lo mismo: «En las dependencias de un edificio público».
La denuncia de Asturias Laica no se hizo esperar: «Pensábamos que estas situaciones, al menos en nuestra provincia, ya formaban parte de la historia». Y, por esa razón, instaron a la Dirección del centro «a que proceda a su retirada».
La respuesta de la directora del IES Jovellanos, Mila Madiedo, tampoco tardó en llegar. Según Madiedo, «al centro no ha llegado ninguna queja», por lo que ella entiende que «no es de recibo esta forma de proceder. Lo lógico es decírnoslo».
«Desde luego, en las aulas y las oficinas no hay ningún crucifijo y, en el caso de que siga ahí, que lo desconozco, no pondremos ningún impedimento a su retirada», precisó Madiedo, conocedora de la sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos que declaró contraria a la libertad religiosa la presencia del crucifijo en las aulas de los centros públicos.
Hubo incluso formaciones como ERC que plantearon entonces su retirada también de los colegios concertados, alegando que España es un Estado aconfesional.
Gasto en docentes de Religión
Incluso el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, llegó a pronunciarse contra la retirada de los crucifijos de las aulas, que tildó de «absurdo increíble», al tiempo acusó al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, que se vio inmerso en la polémica, de orquestar «una estrategia para arrinconar toda manifestación religiosa». «Se trata de una cortina de humo con una gran carga de provocación y a la vez hay todo un diseño que intenta desmontar toda nuestra historia, el alma y la tradición de nuestro pueblo», dijo.
La denuncia de Asturias Laica llega ahora en medio de otro debate, el del pago a los docentes de Religión, ya que acaba de conocerse que el Gobierno ahorraría casi 97 millones de euros si traspasa el coste total que suponen los profesores de Religión en Infantil y Primaria de Andalucía, Aragón, Canarias y Cantabria, las únicas comunidades que aún no tienen asumido ese gasto.
El informe de la Comisión para la Reforma de las Administraciones Públicas (CORA) destaca que, en el curso 2012-2013, el Estado costeó las nóminas de 2.988 profesores (2.059 en Andalucía, 563 en Canarias, 264 en Aragón y 102 en Cantabria) y 137 sustitutos, que supusieron un total de 96.671.722 euros.
Por ello, la comisión recomienda ese «traspaso pendiente», al igual que se ha llevado a cabo con las demás autonomías desde 1981.
La medida ya fue anunciada el pasado mes de octubre en el Congreso por el subsecretario del Ministerio de Educación, que afirmó que el Ejecutivo estudiaba incluir en la reforma de las administraciones públicas que el pago de las nóminas de los profesores de Religión sea asumido por esas comunidades.
El crucifijo denunciado ayer por Asturias Laica. :: E. C.
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