El consejo escolar (formado por profesores y padres), sostienen los tribunales, no puede decidir sobre cuestiones que afectan a derechos fundamentales.
Alguien tendría que explicarnos, dijo el consejero de la Presidencia, la diferencia "entre que un crucifijo colgado en una pared vulnere los derechos fundamentales y no así el que aparece en la mesa donde los ministros y el presidente del Gobierno central juraron sus cargos". Para recalcar sus afirmaciones, De Santiago mostró fotografías del momento en el que Rodríguez Zapatero o la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, juraron sus cargos en presencia de un crucifijo.
Autonomía del consejo
Desde que en el año 2000 la Junta de Castilla y León asumiese las competencias en Educación, dijo el portavoz de la junta, "ni hemos puesto ni quitado ningún símbolo religioso porque es una competencia del consejo escolar". De Santiago volvió a insistir en la autonomía de este órgano para tomar la decisión final sobre la retirada de símbolos religiosos.
El portavoz de la Junta de Castilla y León aseguró que el gobierno regional "nunca ha vulnerado la Constitución Española". Para él, la Junta "nunca ha sido tímida a la hora de defenderla". "No compartimos la sentencia y por eso la recurrimos", dijo, aunque admitió que acatan la sentencia.
El portavoz de la Asociación Cultural Escuela Laica, Fernando Pastor -padre de una niña de nueve años escolarizada en el colegio público Macías Picavea-, aseguró ayer que no se quedará de brazos cruzados. "Continuaré hasta el final planteando los recursos necesarios en los tribunales para evitar que se repitan estas situaciones", dijo.