Un viceministro israelí declara que los terremotos habidos en Italia son un castigo divino por su abstención en una resolución de la Unesco contra Israel.
En una visita al Vaticano, el viceministro de asuntos exteriores de Israel, Ayub Kara, declaró el miércoles estar “seguro” de que los terremotos son un castigo divino a Italia por abstenerse en la votación de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) a favor de desvincular de los judíos la Explanada de las Mezquitas en Al-Quds (Jerusalén).
Hoy sábado, el portavoz de la cancillería israelí en un comunicado se ha disculpado por lo ocurrido. “Condenamos las declaraciones del viceministro”, declara.
Por su parte, la embajada israelí en Roma ha indicado que “las declaraciones de Kara no representan la posición de Israel y su ministerio de asuntos exteriores. Israel otorga gran importancia a sus relaciones amigables con Italia y se solidariza con su Gobierno y su pueblo por los terremotos”.
La abstención de Italia en la Unesco fue virulentamente atacada por la Unión de Comunidades Judías de Italia (UCEI), y más tarde el primer ministro Matteo Renzi también la criticó, calificándola de “alucinante”, lo que llevó al canciller Paolo Gentiloni a anunciar un cambio de dirección en las próximas votaciones.
Con 10 votos a favor, 2 en contra y 8 abstenciones, el texto de la Unesco expresa una profunda preocupación por las obras de construcción y excavaciones arqueológicas de Israel en la ciudad vieja de Al-Quds. El documento también se refiere a la Explanada de las Mezquitas solo con su nombre árabe, el de Mezquita Al-Aqsa, y no como Monte del Templo, su denominación para los judíos.
Esta medida, que ha desatado de nuevo la indignación del régimen de Israel, se toma una semana después de que el Consejo Ejecutivo de la Unesco formado por 58 países aprobó una resolución similar, en la que se subraya que la Explanada es sagrada solo para los musulmanes.