Una profesora musulmana de un colegio de Dewsbury (norte de Inglaterra) fue suspendida por negarse a quitarse el velo cuando impartía sus clases, anunciaron el viernes las autoridades locales
Aishah Azmi, de 24 años, dijo ayer a la radio BBC que ella insistió en llevar su niqab -un velo que sólo deja visibles los ojos- en presencia de sus colegas hombres, pero que estaba dispuesta a quitárselo ante sus alumnos, aunque nunca se lo habían pedido. Varios periódicos afirmaron que fueron los estudiantes -de entre 7 y 11 años- quienes se quejaron de no poder ver los labios de su profesora.
Por otra parte, unas 60 personas se manifestaron ayer frente a la oficina del ministro encargado de las relaciones con el Parlamento, Jack Straw, quien declaró la semana pasada que estaba a favor de que las musulmanas no lleven el velo. La protesta se celebró en Blackburn, la circunscripción de donde es diputado Straw desde hace 30 años y donde más del 25% de los residentes son musulmanes.