David, un bebé de dos meses, se ha convertido hoy en el primer andaluz en recibir un bautizo civil en una ceremonia celebrada en El Borge, un municipio de la comarca malagueña de la Axarquía de unos mil habitantes.
Durante el acto, que se ha desarrollado en la Casa de la Cultura, la pila bautismal y el agua bendita se han sustituido por la lectura de artículos de la Carta Europea de los Derechos del Niño y el compromiso de los padrinos de que el menor será educado en los valores democráticos de la paz, la igualdad y la libertad.
Los padres, Pablo y Laura, han explicado a los periodistas que ninguno de los dos es practicante de la religión católica, pero tenían claro que querían celebrar el nacimiento de su hijo.
Por eso, cuando escucharon a través de la radio que el Ayuntamiento de El Borge había aprobado un reglamento para la celebración de bautizos civiles no lo dudaron un instante.
"Nos pusimos en contacto con el alcalde, José Antonio Ponce (IU), que nos puso todas las facilidades, por lo que decidimos venir aquí, ya que donde vivimos, en Málaga, no existe una oferta similar", ha señalado el padre, de 32 años y profesor de Derecho Penal en la Universidad de Sevilla.
Pablo ha manifestado que entre los familiares, la iniciativa causó sorpresa al principio, aunque en general, fue bien acogida "y sólo a dos allegados que son muy devotos de la religión católica les pareció algo negativo".
La madre ha añadido que ella y su marido no están de acuerdo con los mensajes que se transmiten en el rito católico del bautismo, y espera que este tipo de ceremonias, muy habituales en otros países, se institucionalicen.
Sin embargo, no todo en este acto civil ha supuesto una ruptura con las tradiciones, ya que David ha sido bautizado con un vestido de cristianar, el mismo que empleó su abuela materna, su madre, su tía y otros familiares.
"Mi madre tiene un 'collage' con las fotografías de todos los que nos hemos bautizado con este vestido y queríamos que también estuviera mi hijo", ha apuntado Laura, de 30 años y abogada.
Durante la ceremonia, el alcalde ha precisado que El Borge ha hecho historia al ser el primer municipio andaluz que da la "bienvenida laica" a un nuevo ciudadano, David, cuyo nombre en hebreo significa amado, y es que según ha indicado su madre, "costó mucho que llegase y era muy deseado".
A los vecinos de El Borge no les ha sobresaltado mucho la expectación mediática que ha generado esta iniciativa, ya que están acostumbrados a que el pueblo se llene de cámaras de televisión ante las peculiaridades de su alcalde.
Ponce, regidor desde 1995 y ateo confeso, decretó un día de luto oficial en 2003 cuando comenzó la guerra de Irak y en 2005, cursó una petición para que el Gobierno convocase un referéndum sobre Monarquía o República.