El cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco, ha advertido de que la educación que no incluye enseñanzas de religión y ética se convierte en "la opción tecnócrata de una educación al servicio del puro progreso económico".
Rouco se ha expresado así en una carta pastoral publicada con motivo de la celebración, el próximo día 5 de marzo, de la XXVI Jornada Diocesana de Enseñanza convocada bajo el lema "¡Son el futuro! Evangelizar en la escuela".
En su carta, Rouco advierte sobre "el creciente individualismo y relativismo moral" y señala que, ante esta situación, los docentes católicos deben promover "con creatividad y audacia respuestas a las objeciones teóricas opuestas a los principios evangélicos".
El obispo subraya que, en el proceso educativo la familia necesita el complemento de la escuela para la completa formación de los jóvenes y que ésta debe incluir la dimensión religiosa y moral del ser humano.
Así, señala que, ante el actual "desconcierto educativo", cada vez más padres exigen una "verdadera educación integral que no se reduzca a los aspectos meramente técnicos y funcionales", ya que con una educación que considere sólo el valor material del hombre "se termina por perder el valor de la libertad responsable como su objetivo pedagógico primero".
De ahí la importancia de la educación religiosa tanto en colegios católicos como en los centros de iniciativa estatal, dos vías que no "son privilegios que se otorgan a la Iglesia por parte del Estado, pues a éste no le corresponde imponer un determinado modelo educativo" sino garantizar un marco de libertad que permita a los padres elegir el tipo de educación que desean para sus hijos.
