Reproducimos a continuación el artículo del obispo al que se alude. Su simple lectura no necesita comentario alguno sobre la falsedad de sus afirmaciones sobre el laicismo, que por supuesto respeta todas las creencias personales, pero ello conlleva que ninguna de ellas tendrá privilegios, como le ocurre a la católica que cuenta con 17.000 catequistas pagados por toda la ciudadanía para propagar su doctrina entre escolares. Nada se objetaría desde el laicismo si la iglesia costeara sus catequistas y esas clases se diesen en sus iglesias, y no en la escuela, que es de todos, y ellos son los que no la respetan como institución pública, ni a los demás escolares que pueden tener otras convicciones, o simplemente piensan que a la escuela se va a aprender ciencias y conocimientos, y que las creencias se dan en los lugares de culto de cada creencia o convicción.
Matricula a tus hijos en religión
Diario Vasco. 29-01-2012 Obispo de Donostia