El colectivo Europa Laica ha llevado a la Fiscalía las recientes declaraciones del cardenal de Toledo, Antonio Cañizares, “por si fueran delito”.
La asociación estatal Europa Laica ha pedido a la Fiscalía del Estado que analice las declaraciones de los representantes del Episcopado sobre la retirada de crucifijos, "por si en algún caso pudieran constituir delito".
Según explicó, "representantes de la Conferencia Episcopal Española -en referencia al cardenal arzobispo de Toledo y Primado de España, monseñor Antonio Cañizares– afirman que la sentencia de Valladolid denota cristofobia y califican a la sociedad española de enferma, dentro de las soflamas totalitaristas a las que nos tiene acostumbrados".
Asimismo, exigió a los poderes públicos que retiren los símbolos religiosos de los centros escolares y demás edificios públicos que todavía los mantienen, así como la supresión de las ceremonias de Estado de carácter confesional.
En este sentido, Europa Laica considera que la sentencia del juzgado de Valladolid, que obliga a la retirada de los crucifijos de un centro público de esa ciudad, "tiene una gran consistencia" y se fundamenta en la jurisprudencia del Tribunal Constitucional, que recuerda que "el Estado se prohíbe a sí mismo cualquier concurrencia, junto a los ciudadanos, en calidad de sujeto de actos o de actitudes de signo religioso, teniendo en cuenta la laicidad y neutralidad del mismo".
