El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page,aseguró «rechazar por completo» el uso del niqab y lamentó la polémica que se ha generado por una foto suya en una entrega de premios celebrada en Toledo en la que la única premiada era una mujer que portaba un niqab. Es por ello que ha propuesto a «los que quieren estirar el chicle que planteen la ruptura de las relaciones exteriores con Arabia Saudí».
En una entrevista en Antena 3, recogida por Europa Press, el presidente regional fue preguntado por esta cuestión después de su foto con una mujer con niqab en la ceremonia de entrega de los Premios Internacionales Rey Abullah Bun Abdulaziz de traducción que celebraron en Toledo su octava edición el pasado jueves.
«Si alguien quiere estirar el chicle que plantee la ruptura de las relaciones diplomáticas con Arabia Saudí, cosa que como no se va a hacer nos obligará a todos los cargos públicos a mantener nuestra compostura institucional«, como ocurrió, según defiende, el pasado jueves en Toledo.
Y es que García-Page, que indicó que ese momento le resultó «muy violento», explicó que ni él ni su Gobierno regional organizaron ese acto de entrega de premios, al que simplemente acudió en calidad de invitado.
«Me llama la atención que el PP lo critique cuando la primera fila estaba llena de diputados y senadores de este partido», defendió el presidente regional, que precisó que a ese acto también acudieron embajadores y representantes del mundo académico.
De igual modo, condenó que «desde la extrema izquierda» –en alusión a las críticas que de ese momento realizó el diputado de Podemos David Llorente– «se caiga en las redes cuando no hablan de sus relaciones financieras con Irán«.
Y es que el titular del Ejecutivo regional también se mostró molesto con las informaciones que apuntan que la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, declinó asistir al acto para marcar distancia, asegurando que la alcaldesa toledana no acudió por otros motivos e insistiendo en que «nadie sabía de la presencia deesa mujer con burka«. «Me parece sacar las cosas de quicio. Me molesta que se haga ese uso», condenó García-Page, que lamentó que «se fabriquen noticias con mala intención».
Por último, señaló que él «no le iba a hacer el feo a esa mujer que bastante tiene con ser víctima del burka, de no aplaudir que le ha hayan dado un premio científico de alto prestigio». «Incluso sería injusto con ella misma», concluyó.