Asóciate
Participa

¿Quieres participar?

Estas son algunas maneras para colaborar con el movimiento laicista:

  1. Difundiendo nuestras campañas.
  2. Asociándote a Europa Laica.
  3. Compartiendo contenido relevante.
  4. Formando parte de la red de observadores.
  5. Colaborando económicamente.
La influencia de la religión también se observa en eventos regionales como Las Morismas de Bracho en Zacatecas. Foto: Diana Miranda

[México] Festividades de Zacatecas desatan debate sobre aplicación efectiva del Estado laico

■ El principio de laicidad busca garantizar que el Estado mantenga una neutralidad frente a las religiones

■ En Zacatecas, el catolicismo sigue siendo una fuerza cultural significativa en la sociedad

En el contexto de las Morismas de Bracho en Zacatecas, ha surgido un debate sobre la aplicación efectiva del Estado laico tanto a nivel estatal como nacional. 

Incluso, recientemente candidatos a la Presidencia Municipal utilizaron esta festividad para promover sus campañas. 

En particular, el apoyo del candidato a la alcaldía de Zacatecas Miguel Valera a Las Morismas generó controversia; mientras muchos lo aplaudieron por su respaldo a esta tradición, otros vieron en ello una mezcla preocupante de religión y política.

El análisis de la evolución social revela que la separación entre ideologías religiosas y la toma de decisiones políticas sigue siendo una tarea difícil. Aunque se observa un cambio en las nuevas generaciones, que algunos consideran positivo y otros, negativo, la cuestión sigue siendo compleja y sujeta a ideologías personales.

La separación entre la Iglesia y el Estado en México, formalmente establecida en los artículos 24 y 130 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, se originó en las disputas históricas del siglo XIX entre liberales y conservadores, así como en el conflicto cristero de 1926-1929. Estos eventos, caracterizados por profundas divisiones ideológicas y políticas, llevaron a una severa ruptura con el Vaticano, que solo se resolvió el 21 de septiembre de 1992, durante la presidencia de Carlos Salinas de Gortari, poniendo fin a un extenso periodo de confrontaciones.

El principio de laicidad busca garantizar que el Estado mantenga una neutralidad rigurosa frente a las religiones, evitando que ninguna influencia religiosa se traduzca en decisiones políticas o legislativas. 

Sin embargo, la relación entre religión y política sigue siendo un tema de debate. 

Pauline Capdevielle, en su obra “Nuevos retos y perspectivas de la laicidad”, destaca que la religión y la política han estado históricamente entrelazadas. Los gobernantes buscan legitimación en las instituciones religiosas, mientras que las iglesias buscan influencia sobre el poder político, creando una dinámica compleja donde los intereses mutuos a menudo generan tensiones.

En el contexto actual, existen trabajos como “Religión y política en la 4T de AMLO” de los coordinadores José Alejandro Fuerte, Juan Diego Ortiz Acosta y Darío Armando Flores Soria, donde argumentan que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha abordado temas de política y religión a través de sus conferencias matutinas, creando un “evangelio de AMLO” que refleja su sistema de creencias morales. 

Según mencionan, López Obrador utiliza un enfoque nominalista en su discurso, rechazando conceptos universales y simplificando las ideas para conectar con la población. Este enfoque se manifiesta en sus interpretaciones de la realidad sociopolítica y religiosa del país, en las que mezcla elementos religiosos con su visión política. 

La influencia de la religión también se observa en eventos regionales como Las Morismas de Bracho en Zacatecas. En entrevistas realizadas durante este evento, se reveló una clara división generacional respecto a la influencia religiosa en la política. 

Una asistente al evento, de mayor edad, comentó: “El mundo está cada vez peor, tenemos que recuperar la fe”, subrayando cómo los mayores tienden a valorar la influencia de la religión en las decisiones políticas. 

En contraste, los jóvenes encuestados mostraron una actitud más crítica hacia la influencia religiosa en la política, aunque la mayoría de ellos también votó por candidatos que apoyan las tradiciones religiosas. 

En Zacatecas, el catolicismo sigue siendo una fuerza cultural significativa. En 2020, el 92.3% de la población se identificaba como católica, mientras que el 4.6% se consideraba protestante o cristiano evangélico. 

A pesar del marco legal que establece la separación entre Iglesia y Estado, la realidad muestra que esta separación no es siempre absoluta ni clara. La influencia de la religión en la política y la sociedad sigue siendo notable, y la mezcla de elementos religiosos en la política continúa siendo un tema de debate. 

Total
0
Shares
Artículos relacionados
Total
0
Share