Las dos ciudades autónomas españolas celebrarán el año que viene y por primera vez una fiesta islámica de manera oficial
Melilla es la primera ciudad española que ha superado, desde la reconquista, el 50% de población musulmana. Esta colonia ha crecido de forma continua en las últimas décadas por la inmigración, la reagrupación familiar y su alta tasa de natalidad, hasta sumar 37.763 fieles en una población de 73.382 habitantes. En Ceuta, ese porcentaje es del 41%, según el último estudio demográfico de la Unión de Comunidades Islámicas de España (UCIDE).
"Son casos únicos en Europa, por su enclave geográfico junto a Marruecos", explica el presidente de la Ucide, Riay Tatary. En el resto del país se ha pasado del 1,21% (525.000 musulmanes, en 2003) al 2,8% (1.310.148, en 2008).
El Príncipe y La Cañada
Las barriadas de El Príncipe (Ceuta) y La Cañada (Melilla) son los principales núcleos musulmanes de estas ciudades. Estos dos asentamientos suman 20.000 habitantes. La falta de políticas sociales degradó durante años estas zonas, epicentros de la droga, el paro y la pobreza. Debido a la inseguridad, en las estrechas y serpenteantes callejuelas de La Cañada, "la Policía tardó años en entrar", asegura Hassan, un vecino. Vive junto a una de las dos mezquitas del barrio y tiene siete hijos.
"La Policía tardó años en entrar"
Fátima, una melillense de 48 años, mendiga a mediodía junto a la mezquita principal de Melilla. "¡Sdkafi sabili Alá! [una limosna, por Alá]", exclama. "Los musulmanes dan más limosnas. La hora previa al rezo es la mejor", explica. Con el inicio del Salat Asar de los viernes, la principal oración islámica de la semana, el ajetreo diario de la ciudad baja y Fátima aprovecha para comer. En la vía principal de la ciudad, apenas quedan unos operarios municipales, que terminan de colocar las luces de la navidad cristiana, inspiradas en motivos arquitectónicos árabes.
El 40% de los que viven en España dice haber sido discriminado
En septiembre, el Ayuntamiento de Melilla pactó con las principales asociaciones musulmanas que el 17 de noviembre de 2010 se celebrará la fiesta musulmana del Aid el Kebir o Fiesta del Sacrificio, algo insólito también desde la reconquista. El consistorio de Ceuta siguió el ejemplo e incluyó también la festividad.
Aunque ha habido mejoras en los últimos años, la comunidad musulmana denuncia el férreo rechazo del gobierno autónomo a reconocer oficialmente sus lenguas: árabe y tamazigt. En el ámbito educativo, existen grandes diferencias entre la confesión católica y la islámica: cerca del 55% de los escolares son musulmanes, pero representan el 80% de los que no consiguen el graduado en ESO. En 2000, sólo el 4% de los que se examinaron de Selectividad en Ceuta eran musulmanes, detalla el informe Ceuta y Melilla: nuevos elementos en el escenario, del Real Instituto Elcano.
Residencia de estudiantes
Junto a la plaza de España de Melilla, se encuentra la Residencia para Estudiantes Marroquíes Musulmanes, una escuela propiedad de Marruecos. Allí se imparte el currículo escolar del país vecino, convalidado sólo en parte con el del Ministerio de Educación español. La mayoría procede de pueblos marroquíes cercanos. A la hora de comer, la melena de Fátima, de 15 años, destaca entre las cabezas de sus amigas, cubiertas con velos. Las seis quieren vivir en España, aunque "nunca" pasarían debajo de un camión, como hacen cientos de menores del norte de Marruecos al año.
Los afectados reclaman el reconocimiento de sus dos idiomas
Para impartir la doctrina del Islam en las escuelas, la Ucide está teniendo menos impedimentos en Ceuta y Melilla que en el resto del país. 25 profesores, de los 46 que han autorizado las Comunidades Autónomas y el ministerio, dan clase en estas ciudades. El índice de alumnos por profesor es de 368, en Ceuta, y 649, en Melilla, según la Ucide. El total de España es de 3.260.
Además, la Federación de Vecinos del Príncipe ha propuesto la creación en España del primer Banco Islámico que cumpla con el Corán. Gran Bretaña, Alemania, Marruecos o Indonesia tienen entidades de este tipo a cargo de empresas como Deutsche Bank. Estos bancos no practican la usura, los préstamos son sin intereses y no financian proyectos de juego, armas, pornografía y alcohol. Por el momento, ninguna gran compañía se ha lanzado a la aventura.