El registro se crea a iniciativa de Izquierda Unida, socio de gobierno de los populares
No es el primer Ayuntamiento de España que instaura un registro municipal de bautizos civiles. Ese título le corresponde a Igualada, que lo hizo en 2004. Desde entonces, apenas una decena de municipios -ninguno de ellos una gran ciudad- ha aprobado esta normativa, la mayoría gobernados por PSOE e IU. Sin embargo, La Unión es el primero que lo hace cuyo gobierno ostenta el Partido Popular.
En un Pleno extraordinario celebrado ayer, el equipo de gobierno del PP sumó sus votos a la oposición para institucionalizar este registro. La iniciativa era del concejal de IU, José Haro. El edil explicó que el objetivo es «dar un sello de ciudadanía, complementaria o alternativa a la opción religiosa, a los niños mediante ceremonias civiles de imposición de nombre, en las que los padres y familiares se comprometen a cuidar, proteger y dar una educación a aquéllos basada en los valores democráticos, de paz, libertad y justicia social».
En el PP son conscientes de que esta decisión «posiblemente» pueda sentar mal en determinados ámbitos sociales y religiosos, reconoció el portavoz municipal, Carlos Martínez. Sin embargo, subrayó que «al igual que se viene haciendo con las bodas civiles, no vemos mal que se haga lo mismo con los niños cuyos padres que no deseen bautizarlos por la Iglesia». Martínez insistió en que no tiene por qué generarse polémica «puesto que es una iniciativa de madurez democrática».
Durante los próximos días, el reglamento que crea el registro será sometido a exposición pública. El Grupo Socialista anunció la presentación de varias alegaciones. Una de ellas se refiere al ceremonial. En opinión del el portavoz Mariano Oliver, «el bautizo civil es un acto simbólico de bienvenida a la comunidad y por ello merece celebrase no sólo como un mero acto de inscripción, sino como una auténtica ceremonia».
El registro se prevé que entre en vigor en dos o tres meses, después del período de alegaciones y la aprobación definitiva del pleno.
El Bautismo religioso es un sacramento mediante el cual la Iglesia acoge a los niños como hijos de Dios. Sin embrago, el bautismo civil o laico es una ceremonia alternativa que remonta sus orígenes a la Revolución Francesa, de bienvenida al niño y su integración en la sociedad. Se instituyeron por decreto como símbolo de la separación entre Iglesia y Estado.