Consecuencias tras la matanza de coptos
La junta militar que gobierna Egipto emitió un decreto ley que sanciona la discriminación religiosa, sexual y racial, después de los disturbios del domingo pasado que protagonizaron el Ejército y manifestantes coptos (cristianos egipcios).
La nueva normativa fue promulgada por el presidente del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, mariscal Mohamed Husein Tantaui, y difundida por la agencia estatal de noticias egipcia, Mena.
El decreto castiga con penas de cárcel y multas de entre 5.000 y 8.300 dólares a todo aquel que lleve a cabo acciones que generen discriminación contra un grupo debido a su sexo, raza, religión o lengua.
El texto señala que serán especialmente castigados quienes tengan una conducta que lleve al abandono del principio de igualdad de oportunidades, justicia social y alteración de la estabilidad.
Asimismo, serán penalizados con al menos tres meses de cárcel y el pago de multas de entre 8.300 y 16.700 los funcionarios que discriminen a los ciudadanos en virtud de su religión, sexo o raza.
Consecuencias de la matanza
En los choques del pasado domingo, que comenzaron tras una manifestación de coptos por la quema de una iglesia en el sur del país, fallecieron al menos 25 personas y más de 300 resultaron heridas, la mayoría civiles.
Mientras que los manifestantes han acusado a las fuerzas de seguridad y a los "baltaguiya" (matones) de atacarles, los dirigentes castrenses egipcios han rechazado cualquier responsabilidad.
Los cristianos representan menos de un 10% de los 80 millones de egipcios y se quejan de sufrir discriminación desde hace años.