La Iglesia logró que el Congreso de la Unión aprobara el 15 de diciembre de 2011 una reforma que abre la posibilidad, entre otros alcances, de impartir enseñanza religiosa en escuelas públicas
La Iglesia ha roto en México con los principios de un Estado Laico y los masones intentan frenarla.
Un “rotundo no” a la reforma al Artículo 24 Constitucional —que defiende la libertad religiosa— fue uno de los puntos discutidos durante dos días en el I Congreso Masónico Nacional e Internacional celebrado en Tuxtla Gutiérrez y clausurado este sábado a media tarde.
La Iglesia logró que el Congreso de la Unión aprobara el 15 de diciembre de 2011 una reforma que abre la posibilidad, entre otros alcances, de impartir enseñanza religiosa en escuelas públicas, y espera que el Senado secunde esa decisión tras la votación en los congresos locales.
Jorge Romeo Cancino, del más alto cargo de los masones en Chiapas, dijo, tras clausurar el Congreso que contó con la participación de 16 representaciones de logias, que los masones continúan con los cabildeos en los congresos locales para que éstos voten por un Estado laico y no religioso.
Los párrafos dos y tres del Artículo 24 reformado sustentan que “El Congreso no puede dictar leyes que establezcan o prohiban religión alguna” y que “Los actos religiosos de culto público se celebrarán ordinariamente en los templos. Los que extraordinariamente se celebren fuera de éstos se sujetarán a la ley reglamentaria”.
Romeo Cancino dijo que es muy posible que el Congreso de Chiapas diga “No a la reforma”, porque varios integrantes del Poder Legislativo, entre ellos algunos altos cargos, son masones.
Los masones, reunidos en una de las salas del Hotel Camino Real en la capital de Chiapas, han entendido como un revés para ellos, o una pérdida de poder, el hecho de que la Iglesia esté dando al traste con el Estado Laico, uno de los principales legados de la reforma concretada por el presidente Benito Juárez —masón como Miguel Hidalgo, José María Morelos y Lázaro Cárdenas, quienes también han marcado la vida política de México— en 1859: separar a la Iglesia del Estado.
—Hemos perdido poder y presencia —dijo Jorge Romeo Cancino, Muy Respetable Gran Maestro de la Gran Logia de Chiapas, al final de su discurso de clausura.
—¿De qué manera lo han perdido?
—La Iglesia ha roto con los principios de un Estado Laico. El clero tiene la complicidad de algunas autoridades.
—¿Pretenden una República religiosa?
—Sí, pretenden un Estado religioso.
—¿Cómo pretenden frenarlos?
“No es que queramos poder, sino queremos que las instituciones públicas trabajen para resolver los problemas sociales, de los más necesitados”, dijo Jorge Romeo Cancino antes de responder que los masones están trabajando en el cabildeo con los Congresos locales.
—¿Hay posibilidades de que Chiapas diga no a la reforma?
—Sí.
Uno de los acuerdos alcanzados durante los días del Congreso es la creación de una cadena de unión como principio de defensa del Estado laico. En cada uno de los 32 estados mexicanos existen entre 30 a 40 Logias masónicas. Ya todas trabajan para reposicionarse ante las instituciones públicas, para defender sus logros —entre éstos el Estado laico de la reforma juarista—, para refundarse como organización.
Han acordado otro Congreso para revisar los avances.
—Es posible que Chiapas diga no —repitió Jorge Romeo Cancino como despedida.
