Edzard Ernst carga contra lo que juzga una carencia de pensamiento científico entre los practicantes de su campo
La revista Nature publicó ayer en su página web una entrevista con el médico alemán Edzard Ernst, que fue en su día "el primer catedrático del mundo de medicina alternativa". En sus declaraciones, Ernst carga contra lo que juzga una carencia de pensamiento científico entre los practicantes de su campo, desacreditando además la homeopatía como "bastante inútil".
Tras finalizar sus estudios de medicina, Ernst se formó como homeópata. "Aprendí a pensar de forma crítica", apunta, y se lamenta de que "como médico, no necesariamente aprendes a pensar [así]". En 1993 ganó la cátedra de Medicina Complementaria de las Universidades de Plymouth y Exeter (Reino Unido).
"Todo el mundo en nuestro campo usa la ciencia para probar que sus ideas son correctas, no si lo son", se lamenta Ernst. "En mi campo, la evaluación crítica se ve como algo negativo", añade.
Respecto a la homeopatía, señala: "Es bastante inútil. Me habría gustado que las pruebas dijeran lo contrario porque me formé como homeópata. Habría sido bueno ganar un premio Nobel mostrando un efecto, pero las pruebas están claramente en contra". Ernst reconoce estar "sentado en una rama y tratando de serrarla".