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¿La ciencia y la religión son incompatibles?

¿La ciencia y la religión son incompatibles?

Ciencia y Religión siempre han estado y estarán enfrentadas. No puede ser de otra manera. Veamos como son comparativamente

1- Sus principios son opuestos totalmente:

La ciencia busca LA VERDAD.

La religión parte del principio de que YA CONOCE LA VERDAD.

2- Los conocimientos anteriores son asimilados de diferente forma:

Para la ciencia, todo lo que se conoce está sujeto a revisión, no hay nada inamovible y sólo se precisa que se demuestre que algo no es así para que inmediatamente se suprima o se cambie.

Para la religión: todo lo que se conoce es inamovible porque es revelación divina o fruto de la infalibilidad de los padres de la iglesia, de los Papas, por lo tanto casi todo es de imposible cambio.

3- Son diferentes en el conocimiento de la verdad y los principios de las cosas:

La ciencia busca pruebas: observa, experimenta, pregunta y busca las respuestas.

La religión se basa en dogmas que no se pueden probar, en principios sin ninguna base y, frecuentemente, sin racionalidad alguna.

4- A lo largo de los tiempos, los principios que mueven a ambas causan efectos muy diferentes:

La ciencia hace progresar y desde los tiempos más primitivos el hombre ha ido cambiando gracias a la suma de conocimientos y al avance científico.

La religión no avanza: se modifican sus sistemas, sus templos se construyen de otra forma y aprovecha todo lo que la ciencia ha mejorado en los humanos, pero por si misma no produce mejora alguna: permanece inamovible y sólo se modifica lo mínimo para sobrevivir y cuando algunas viejas actitudes o creencias resultan insostenibles hoy en día (quemar herejes, por ejemplo).

5- Ante supuestos conocimientos no demostrados, sus actitudes cambian:

La ciencia sobre suposiciones, crea hipótesis que luego trata de probar recurriendo a diversos métodos de investigación, preguntas, observaciones y experimentos, hasta que consigue pruebas sobre esas suposiciones, tratando siempre de probarlas.

La religión exige a sus fieles que sin probarles nada tengan fe, es decir, que crean lo que les digan, porque así lo quiere un ser superior llamado Dios que no habla con los fieles sinó con santos y profetas. Y en base a esto crea dogmas indemostrables.

6- La actitud ante los nuevos descubrimientos es totalmente opuesta:

La ciencia ante una idea, hipótesis o resultado de una investigación, se pone a trabajar para conseguir que desde allí se puedan alcanzar nuevos conocimientos.

La religión y la iglesia que la representa, hace lo contrario, o sea, que si la hipótesis, información o nuevo dato científico no coinciden con su doctrina, lo condenan automáticamente. Según su poder temporal, reprime la investigación o llega a tratar de eliminar a cualquiera que pretenda presentar pruebas de algo que va contra su doctrina (o creen que va). Ahí tenemos numerosas pruebas históricas: Un ejemplo ilustrativo podemos verlo en el caso histórico de Galileo Galilei:

Hace 400 años, con la enseñanza en manos de instituciones religiosas, todo el mundo aceptaba de buen grado las teorías de Aristóteles y Ptolomeo de que el sol y los demás planetas giraban alrededor de la Tierra, porque todo ello estaba en consonancia con los escritos bíblicos. Sin embargo las explicaciones presentadas por Galileo eran tan contundentes que no pasó lo que sucediera con Copérnico años atrás ( El modelo que suscribía que la Tierra giraba alrededor del Sol, permitía explicar el movimiento aparente de los planetas. Pero molestó a mucha gente. La Iglesia Católica en 1616 clasificó el libro de Copérnico en su lista de libros prohibidos. Martín Lutero lo calificó de astrólogo advenedizo, diciendo que “este estúpido quiere trastocar la ciencia astronómica”. “Pero la Sagrada Escritura nos dice que Josué ordenó parar al Sol, y no a la Tierra” . Desde hace tiempo sabemos que su razonamiento era correcto, pero las ideas imperantes en su época impidieron que se aceptase. Así un decreto del Santo Oficio lo declaraba culpable por “teoría contraria a las Escrituras, insensata y absurda”. Sentenciado a la hoguera, para salvar la vida tuvo que retractarse de las ideas copernicanas. Pero no se salvó de pasar en prisión el resto de sus días.

El enfrentamiento histórico entre las dos concepciones del Cosmos, centrado en la Tierra o centrado en el Sol, alcanzó su punto culminante en los siglos dieciséis, y diecisiete en la persona de un hombre que como Tolomeo era astrólogo, y astrónomo. Relata Carl Sagan en Cosmos :“Vivió en una época en que espíritu humano estaba aprisionado y la mente encadenada; en que las formulaciones eclesiásticas sobre cuestiones científicas, hechas un milenio o dos antes, se consideraban más fidedignas que los descubrimientos contemporáneos”… “en que toda desviación incluso en materias teológicas arcanas, tanto católicas como protestantes, con respecto a las preferencias dominantes de alabanza a Dios, se castigaba con la humillación, la tributación, el exilio, la tortura o la muerte”…

Caso parecido lo sufrió Charles Darwin por el rechazo de la iglesia de Inglaterra a su teoría de la Evolución de las Especies, publicada en 1859 y que contradecía la versión de la creación del mundo por Dios en siete días, según el Génesis de la Biblia, y enseñaban ellos, claro está muy difícil de encajar a que el hombre descienda de un antepasado común con los simios. Rechazaban la evolución darwiniana porque ponía en tela de juicio el Génesis que ellos propagaban con la Biblia, como verdad revelada.

Pero hasta Darwin no existía ninguna concepción científica de lo que era el ser humano. Sólo mitos. Había una falsa autoconciencia.

Ahora, doscientos años después, cuando toda la comunidad científica respalda la teoría de Darwin, la Iglesia anglicana de Inglaterra pide disculpas por la mala interpretación, rechazo y persecución que hizo de las ideas de Darwin. Reconoce que la Iglesia anglicana repitió el error que la Iglesia católica, cometió con Galileo.

Otros casos son Giordano Bruno, que en 1600, fue acusado de herejía, preso por la Inquisición y llevado a Roma donde fue quemado vivo en la hoguera. El médico español, Miguel Servet, descubridor de la circulación pulmonar, que murió quemado en la hoguera, condenado por hereje por el teólogo cristiano-protestante Calvino.

Casos parecidos, quemados en la hoguera, fueron Segarelli en Parma, el reformador religioso Juan Hus en Constanza (en Praga hay una estatua dedicada a él), etc.

7- Las consecuencias de la acción de la ciencia y la religión sobre la Humanidad son totalmente contrarias:

La ciencia está al servicio de la Humanidad. Todas las comodidades de que disponemos hoy día, la medicina, los transportes, el uso de la energía, la mejora en la obtención de alimentos, todos los avances tecnológicos, etc., son beneficios que han sido promovidos por la ciencia.

La religión hace exactamente lo contrario: utiliza a los fieles para prometerles bienes espirituales pero a cambio obtiene de ellos beneficios constantes: limosnas, pagos por oficios religiosos, construcción de templos, etc., etc. Todos los millones de iglesias, capillas, santuarios, etc. que existen han sido realizados y/o pagados por los fieles; los millones de curas, miles de Obispos, cardenales y Papas, han sido alimentados y encumbrados con el dinero de los fieles. Las guerras santas, eran también pagadas por fieles y los ejércitos nutridos por fieles.

8- La acción de ambas sobre los seres humanos ha sido totalmente opuesta:

La ciencia siempre ha sumado el resultado del trabajo de todos los investigadores, fuesen quienes fuesen, buscaban el bien, la mejoría del trabajo, de los cultivos, de la salud, sin nada a cambio. Otra cosa es que más recientemente, capitalistas hayan explotado los resultados de la ciencia para beneficiarse personalmente, pero incluso en estos casos, no es la ciencia la que se aprovecha, sino ciertos explotadores, los que usan a la ciencia en su propio beneficio.

La religión siempre presionó al pueblo para que no hubiese disidentes ni nadie que pudiese oponerse a su poder: recordemos algunos hechos históricos: Sólo en España, bajo los Reyes Católicos, se estima que entre diez y veinte mil fueron quemados vivos en la hoguera y unos ochocientos mil desterrados por no querer convertirse o no seguir la ortodoxia impuesta por la Santa Madre Iglesia. Las autoridades religiosas de la época afianzaban su poder mandando a la hoguera a quienes disentían o se oponían a su dominio acusándoles de herejía. La Inquisición, El Santo Oficio son ejemplos harto conocidos.

9- La acción de ambas a lo largo de los tiempos sobre la Humanidad es muy distinta:

La ciencia siempre ha mejorado la vida humana. Si se ha hecho mal uso de ella lo hicieron los hombres.

La religión solo ha producido oscuridad. Probablemente más de mil años de oscuridad se podían haber evitado si los religiosos no hubieran visto con recelo primero y odio después los descubrimientos científicos, porque cuestionan su principio más esencial, contradicen las enseñanzas de la Biblia y los dogmas religiosos, lo que es atacar las bases en que sustentan su misma existencia. La ruptura entre teología y evolución es relativamente reciente. A través de doctrinas, dogmas, etc., establecen una red de control religioso que contribuye de manera específica retardar la realidad científica y su método. Esto retrasa el progreso, la racionalidad y la llegada de la modernidad.

10- La acceptación de los cambios y nuevos conocimientos difiere:

1- La ciencia acepta encantada cualquier cosa que se pueda probar, incluso investiga sobre hipótesis.

2- La religión niega todo lo que no sea su doctrina, aunque a veces tiene que ir cambiando con los tiempos y los nuevos conocimientos, aunque lo hace siempre cuando ya no le queda más remedio que aceptarlo porque está probado científicamente: recuerdese la Tierra como centro del Universo, la circulación sanguínea en el hombre, la evolución (que todavía muchos se resisten a admitir), el uso de las vacunas, el uso del pararrayos, la analgesia en el parto, el uso del preservativo, la existencia del purgatorio, el limbo de los justos, etc.:

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Visión actual de la Iglesia y sus apoyos políticos:

Las derechas europeas y el Papa se están empleando duramente contra el laicismo. Aunque poco tienen que ver las políticas de la derecha con el mensaje evangélico, existe una campaña en marcha contra el laicismo. En Nov-07 el Papa Benedicto XVI en la 2ª Encíclica “Spe Salvi” hace una dura crítica contra el ateismo. Critica la fe en el progreso y la ciencia. Manifiesta su “preocupación por la crisis de la fe, sustituida por la fe en el progreso y la ciencia”. Trata temas como la esperanza, la salvación y la fe, el diálogo entre religiones, o la relación entre progreso, ciencia, libertad y razón. Libertad sustituida por el materialismo que el Papa reprocha a Marx. -El progreso es ambiguo, dice, porque ofrece nuevas posibilidades y también la posibilidad del mal. Por ello critica la ciencia basada sólo en la razón. Dice que el hombre necesita a Dios, sino sería un hombre sin esperanza… Para Benedicto XVI el Juicio Final existe igual que el Infierno y Purgatorio.

Claro que el Papa también critica muchas cosas más. Estos son según el Papa los males actuales del mundo::

El primero, Materialismo.

El segundo, Darwinismo.

El tercero, Ateísmo.

El cuarto, Panteísmo.

El quinto, Deísmo.

El sexto, Racionalismo.

El séptimo, Protestantismo.

El octavo, Socialismo.

El noveno, Comunismo.

El décimo, Sindicalismo.

El undécimo, Liberalismo.

El duodécimo, Modernismo.

El décimotercero, Laicismo.

El décimocuarto, la Masonería.

En total, se podría decir que la Iglesia cree que todo es malo excepto su propia doctrina. Pero, lamentablemente, su doctrina en muchos siglos no ha resuelto los problemas del mundo que otras personas pretenden resolver por otros medios y pensamientos legítimos. Por eso, para estudiar la evolución tiene que haber Darwinismo; para defender los derechos de los trabajadores, el sindicalismo; para defender los derechos de los parias y de los socialmente deprimidos, el Socialismo y el Comunismo, etc., etc. Pero para la Iglesia rige el principio: “si no estás conmigo estás contra mi”. Y por algo será.

RESUMEN

Ciencia:

¡Cuantos esfuerzos científicos para poder alcanzar los conocimientos que tenemos…! ¡Cuanto bien ha causado la Ciencia a la Humanidad! ¡Cuanto hemos progresado desde la Prehistoria hasta hoy! Todo se ha conseguido con aportaciones científicas hechas por los hombres, en su mayor parte, de una forma desinteresada.

Religión:

¡ Cuanto incordio y zancadillas de la Iglesia a cualquier avance científico…! ¡Cuanta explotación humana a lo largo de siglos y siglos (prueba de ello son todas las Iglesias existentes, las Catedrales, los bienes de la propia Iglesia, el sustento de millones de sacerdotes a lo largo de la historia de la Humanidad, de los ricos Obispos, de los poderosos Papas).

La Iglesia es dueña actualmente en España del 80% de todo el Patrimonio Histórico, de 100.000 propiedades inmobiliarias, de 100.00 hectáreas de tierra agricola. El Estado español abona a la Iglesia 7.000 millones de Euros cada año, que son del pueblo y que deberían emplearse en beneficio de este pueblo. Y los fieles además siguen pagando y dando dinero a los curas, obispos y Papas para aumentar su riqueza y su patrimonio y el ya inmenso patrimonio de la iglesia.

Ramón Díaz /Emilio Rolán

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