Las Hermanitas de los Pobres han presentado una petición solicitando que la Corte Suprema valide la excepción religiosa que las proteja de cumplir con el mandato sobre los anticonceptivos de la Ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
La renovación de la solicitud se logró luego de que varios estados, incluidos Pensilvania y California, demandaron a las Hermanitas de los Pobres en respuesta a una excepción otorgada en 2017 después de su última comparecencia ante la Corte Suprema.
“Los estados argumentan que a pesar de que hay entredichos en el mandato en el caso de las Hermanitas en este país, estás violaron la ley para que el gobierno federal emita una excepción religiosa”, mencionó Diana Verm, abogada principal de Becket Fund for Religious Liberty, quienes brindan asesoría legal a las religiosas.
“Las Hermanitas solo quieren volver a seguir sirviendo a los ancianos pobres”, dijo Verm. “Si la Corte Suprema falla a su favor, serán capaces de hacerlo.”
Las Hermanitas de los Pobres son una congregación religiosa católica dedicada al cuidado de los ancianos pobres, profesan los votos de pobreza, castidad y obediencia.
Cuando el mandato del HHS fue anunciado en 2011, las Hermanitas fueron informadas que no serían protegidas y tendrían que brindar anticonceptivos a sus empleados por medio de su plan de seguro, violando sus creencias. A pesar de ser una orden religiosa, las Hermanitas de los Pobres no calificaron como empleadores religiosos, ya que sirven y emplean a personas de diferentes religiones.
En 2013, la orden presentó su primera demanda contra el HHS, reclamando que el mandato estaba violando su libertad religiosa. Se les otorgó una orden de emergencia a fines de ese año que las exoneró de pagar miles de dólares en multas por no cumplir con el mandato.
Tres años después, la Corte Suprema se puso de lado de las religiosas y ordenó al gobierno encontrar una solución que pueda calmar a ambos lados. En 2017, la solución llegó en una nueva regla del HHS, que eximía a las organizaciones religiosas sin fines de lucro del mandato.
Si las Hermanitas de los Pobres no ganan este caso judicial, señaló Verm, tendrían que pagar miles de dólares en multas al gobierno. «Eso sería devastador», dijo.
Traducido y adaptado por Harumi Suzuki. Publicado originalmente en CNA