El alcalde de Lorca, Fulgencio Gil, antes que del Partido Popular, es de “nacimiento del Paso Blanco”. Para los habitantes de la Ciudad del Sol no hay medias tintas cuando se habla de la Semana Santa: se es del Paso Blanco o del Paso Azul. Con semejante convicción pasional, a Gil le ha sentado como un tiro que el arranque de la campaña electoral, el 12 de abril, coincida con el Viernes de Dolores, que marca el inicio de los desfiles procesionales. “Es un disparate y un despropósito”, se ha quejado en declaraciones a EL ESPAÑOL. La Semana de Pasión es uno de los motores del turismo de la tercera ciudad de la Región de Murcia porque está declarada de interés turístico internacional. Por ello, el regidor y presidente del PP lorquino ha avanzado que su partido “no participará” en la pegada de carteles que tradicionalmente comienza en el Barrio de San Cristóbal.
“Aquí, la Semana Santa es lo más importante, es el evento, y el pueblo se moviliza con sus seis cofradías, hay desfiles por toda la ciudad y no me veo con el cepillo y el engrudo”, ha añadido Gil para insistir que durante el arranque de la campaña de las elecciones generales, prevalecerá su presencia en las procesiones como primera autoridad municipal, antes que sus quehaceres electorales para los populares. “La Semana Santa, con diferencia, es nuestro principal atractivo turístico y las elecciones son un elemento que distorsiona y que puede condicionar las visitas de la gente”. De forma que el Viernes de Dolores asistirá a la primera procesión de la Semana Santa, que corresponde al Paso Azul, y llegada la medianoche, el presidente del PP lorquino no irá a pegar carteles porque estará –como un devoto más- a las puertas de la concurrida Iglesia de San Francisco para asistir a la Serenata de la Virgen de los Dolores. “Si otros partidos hacen la pegada de carteles lo respetaré”.
El regidor ha avanzado a este diario que la próxima semana se reunirá con los presidentes de las seis cofradías de Lorca y convocará una Junta de Portavoces para analizar la situación. “Yo no puedo acudir a un mitin y perderme la Procesión de Las Palmas del Domingo de Ramos”. Con las hermandades y los grupos políticos, entre otros asuntos, estudiará qué espacios públicos de la ciudad se dedicarán a los desfiles procesionales y cuáles a los actos de campaña de los distintos partidos. “Por poner un ejemplo, en la Plaza de España se producen encuentros de imágenes, la procesión de la Hermandad de La Curia…, pero en las elecciones es habitual utilizar esta plaza en actos de campaña: ¿cómo oferto este espacio a la Junta Electoral para que un mitin coincida con el sonido de las cornetas?”.
Este punto del término municipal no es el único en el que habrá que determinar si prevalece la devoción religiosa sobre la pasión política. La tribuna de autoridades de la Semana Santa se ubica en la intersección de la avenida Juan Carlos I con la Alameda de la Constitución y precisamente, en este punto, tanto en comicios estatales como autonómicos o municipales, se instala un gran panel con las fotos de los candidatos de cada partido. “No se podrá ver porque estará delante la tribuna de presidencia”, advierte el alcalde. Es habitual que las dos aceras de la avenida Juan Carlos I se la repartan el Paso Azul y el Paso Blanco, colocando sus banderolas en las farolas, y el regidor ha confirmado que los rostros de los candidatos no sustituirán a los colores de estos pasos en las luminarias. “No ofertaremos esos espacios a la Junta Electoral”.
La cascada de reacciones al calendario electoral también ha llegado desde el Paso Azul, cuyo estreno con su imagen titular, la Virgen de los Dolores, coincidirá con el inicio de la carrera electoral el 12 de abril. “Estamos disgustados”, zanja sin paños calientes José María Miñano, presidente del Paso Azul. “Ese día reunimos a entre 20.000 y 25.000 personas y no nos gustaría que la campaña distorsionase el acto”. El presidente de los azules aplaude al alcalde de Lorca por anunciar que el Partido Popular no participará en la pegada de carteles para respetar el Viernes de Dolores. “Me parece bien porque hay tiempo para hacer publicidad política”. De hecho, Miñano subraya que “animo” a que el resto de partidos políticos sigan el ejemplo de los populares y ese día no se dediquen a pegar carteles, sino a escuchar la Serenata Azul.
“Creo que hay muchas fechas durante todo el año para convocar elecciones: no nos gusta que se mezcle la política con la religión”. El presidente del Paso Azul subraya que ni el calendario pasional ni los horarios de las procesiones se alterarán para que no coincidan con los actos de campaña. “¡Faltaría más!”, clama. En el ‘eterno rival’, en la sede del Paso Blanco, también hay malestar por las fechas de la campaña, tal y como demuestra el tono de la advertencia que lanza uno de sus mayordomos, Federico González: “Vamos a estar más pendientes de los pasos que de los candidatos”. Ni Pablo Casado, ni Pedro Sánchez, ni Albert Rivera, le quitarán protagonismo a la patrona de los blancos, la Virgen de la Amargura.
“Esto es una faena para todas las cofradías de España”, reflexiona el secretario del Paso Blanco, Clemente Manzanera, al tiempo que aplaude la iniciativa del Partido Popular de Lorca de no pegar cartelería. “Me parece bien que se olvide de la campaña, en Lorca todos los partidos saben que la Semana Santa es nuestra bandera y seña de identidad y creo que si el PP ha tomado esa decisión, el resto de formaciones hará lo mismo”.