Sídney (Australia), 24 abr (EFE).- Las autoridades de Australia informaron este miércoles de la detención de siete jóvenes en la ciudad de Sídney en el marco de las investigaciones en torno al ataque con cuchillo perpetrado la semana pasada por un adolescente contra un obispo en Sídney, un incidente calificado como terrorista.
«Estos individuos se adhieren a una ideología extremista violenta por motivos religiosos», dijo hoy en una rueda de prensa el subcomisionado de la Policía del estado de Nueva Gales del Sur, David Hudson, al detallar que las edades de los detenidos oscilan entre 15 y 17 años.
Según el alto mando policial, el comportamiento de estos adolescentes, que estaban bajo vigilancia desde el ataque contra el obispo, mostraban indicios de que era «probable» que se produjera un nuevo «atentado» terrorista.
Tras este operativo realizado hoy por el equipo conjunto de lucha contra el terrorismo (JCTT) las autoridades también informaron que otros cinco menores, que no han sido detenidos, colaboran con las investigaciones policiales.
En este operativo, que implicó 13 registros, participaron unos 400 miembros de la Policía Federal Australiana y los servicios de inteligencia, así como de las fuerzas de seguridad y la Comisión contra el Crimen del estado de Nueva Gales del Sur, cuya capital es Sídney.
En la noche del 15 de abril, un adolescente de 16 años trató de apuñalar al obispo Mar Mari Emmanuel, de 53 años y líder de la iglesia asiria del Buen Pastor del distrito Wakeley -a las afueras de Sídney-, mientras oficiaba una misa retransmitida por internet.
A raíz de este incidente, las autoridades australianas acusaron el pasado viernes al perpetrador de terrorismo, un delito que conlleva una pena máxima de cadena perpetua en Australia.
Mientras la defensa del menor alega que este tiene un historial de enfermedades mentales.
El obispo, que fue socorrido por otros feligreses que lograron reducir al atacante, ya se encuentra fuera de peligro.
En la noche del ataque además se produjeron unas revueltas de centenares de personas en los alrededores de la iglesia que pedían que les entreguen al supuesto atacante, que se saldaron con decenas de policías heridos y daños a los coches de la Policía y la propiedad.
Las autoridades han acusado hasta el momento a cinco hombres y un adolescente de 17 años por estas revueltas.
En Australia -en donde la mayoría de los ataques han sido perpetrados por yihadistas armados con cuchillos o armas de fuego en las ciudades de Melbourne y Sídney- rige desde 2022 la alerta terrorista de «posible» (el tercer nivel más alto sobre una escala de cinco).
