Alexis Mera, secretario jurídico de la Presidencia, dijo que el Gobierno Nacional quiere tener «buenas relaciones» con la Iglesia Católica. Este viernes, 4 de septiembre del 2015, dio por terminado el impasse que protagonizó con el monseñor Antonio Arregui.
Mera dio estas declaraciones tras la reconstrucción de los hechos sucedidos el 30 de septiembre del 2010 en el Regimiento Quito. Él apuntó que el Gobierno quiere tener buenas relaciones con las autoridades religiosas. «Yo creo que el obispo de Quito ha sido un extraordinario actor en este impasse y tuvimos una reunión fraterna», señaló.
Además, comentó que las relaciones entre el Gobierno y la Iglesia no ha sido afectadas. «Lo doy absolutamente superado. El hecho de tener la diferencia con un obispo no afecta las relaciones del Gobierno con todos los obispos del Ecuador».
El incidente se produjo entre el secretario de la Presidencia y monseñor Antonio Arregui, el pasado 27 de agosto. El funcionario de Gobierno calificó como «insolente recadero de la derecha» a la autoridad religiosa.
Esto, tras las declaraciones de Arregui en las que manifestó que el diálogo nacional convocado por el presidente Rafael Correa «debe recuperar credibilidad». Tras este conflicto se reunieron monseñor Fausto Trávez y Ricardo Patiño para limar asperezas.
El propio Mandatario tomó medidas contra Arregui. «Hemos presentado la respectiva carta de protesta al Nuncio Apostólico porque eso está prohibido por el Derecho Romano… el involucramiento, peor de obispos, en política», señaló en el Enlace Ciudadano del 29 de agosto pasado.
