Cuando se producen abusos sexuales, parece que muchas víctimas no se deciden a denunciar por vergüenza o por miedo a represalias o a verse estigmatizados. El temor a represalias o a sentirse incomodados de algún modo lo comparten a veces quienes, sin ser víctimas, pueden aportar testimonios o pruebas sobre abusos. Tanto víctimas como testigos comparten en ocasiones la creencia de que sus aportaciones no van a servir para nada, y, si –como ahora en Granada– ya hay un caso abierto, que no es necesario que se impliquen porque no van a aportar nada relevante y el asunto se va a resolver de todas maneras.
Granada Laica, ante la investigación de sacerdotes católicos por abusos sexuales sobre menores en Granada, y ante la posibilidad de que haya víctimas, testigos o personas con posibles pruebas que se mantengan en silencio, les pide encarecidamente que se decidan a aportar lo que puedan a la justicia, pues su contribución puede ser importante para que ninguno de los pederastas o encubridores quede impune y, sobre todo, para que dejen de ejercer abusos o encubrimientos. Pensamos que la simple suma de testimonios diversos podría ser significativa en alguna ocasión.
Por supuesto, esta petición la hacemos extensiva a todos los casos de abusos, no sólo al que ahora nos ocupa –aunque en este momento sea aquí más perentorio por la investigación en marcha–. Y no sólo a los que se refieren a abusos actuales; sobre los casos ya pasados también debe hacerse justicia, y el que no queden impunes puede disuadir a pederastas o encubridores actuales.
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