La decisión adoptada por el alcalde de Benicarló, Marcelino Domingo, de quitar la fiesta dedicada al patrón, que el rey Carlos I concedió a Sant Bertomeu en 1523, no ha agradado ni a la Iglesia ni al Bloc. El edil nacionalista José Luís Guzmán criticó la manera de actuar del alcalde y del PP local con las fiestas populares de cara a 2011. Según denunció, «no han consensuado con nadie, ni con los comerciantes ni con la propia Iglesia». Guzmán indicó que en una conversación mantenida con los sacerdotes éstos le aseguraron «no saber nada» de la decisión ni los motivos por los que Sant Bertomeu dejará de ser fiesta local oficial. La decisión provocará, por ejemplo, que muchos comercios tengan que abrir.
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