La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Carmen Calvo, ha asegurado su compromiso de mantener «con escrúpulo» la «neutralidad religiosa» de las instituciones españolas y de garantizar tanto el derecho a la libertad de culto como a «la libertad de no tener ninguna creencia».
«Habrá que seguir manteniendo con escrúpulo la neutralidad religiosa de las instituciones españolas y el cumplimiento garantista estricto de lo que es un derecho fundamental de los españoles», ha asegurado la vicepresidenta primera del Gobierno.
Una sociedad de diversidad religiosa
Si bien, también ha añadido que la sociedad española «es ya una sociedad de diversidad religiosa«. «Somos una sociedad que garantiza la libertad en cuanto se refiere a las creencias religiosas, no solo la libertad de la opción sino la libertad de no poder ser obligado a ninguna creencia, de no tener ninguna», ha subrayado.
Por otro lado, en respuesta a una crítica de Vox, ha recalcado que la Conferencia Episcopal Española ha afirmado que el Gobierno no ha atentado contra la libertad de culto durante el estado de Alarma. Los cardenales arzobispos de Barcelona y Madrid, Juan José Omella y Carlos Osoro, presidente y vicepresidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), respectivamente, señalaron la pasada semana que el Gobierno no ha tenido «ninguna intención de cercenar» el derecho a la libertad de culto durante el Estado de Alarma por la pandemia de coronavirus COVID-19 y que el desalojo de algunas iglesias en este tiempo ha sido «anecdótico».
En todo caso, la Asociación Española de Abogados Cristianos ha presentado una querella ante el Supremo contra Pedro Sánchez en la que le acusa de un delito de prevaricación y dos contra los sentimientos religiosos por interrupción y prohibición de culto, ambos «con el agravante de discriminación».