El colectivo islámico sufre discriminación en la vivienda y el empleo
La islamofobia crece en Europa. Esta es la principal conclusión de un informe del Observatorio Europeo del Racismo y la Xenofobia (EUMC), que alerta de la creciente discriminación que sufren los musulmanes en los países de la UE cuando se trata de conseguir un empleo o de acceder a la vivienda y la educación.
Los autores del documento, titulado Los musulmanes en la UE: Discriminación e islamofobia, constatan que los prejuicios contra el islam son a veces motivo de actos violentos, desde las amenazas verbales hasta la agresión física.
En este estudio, el primero que analiza la situación de los 15 millones de musulmanes residentes en territorio europeo, se pone manifiesto que las personas de religión islámica están representadas de forma desproporcionada en las capas sociales de bajos ingresos, que viven en peores viviendas y que sufren mayores tasas de desempleo.
Además, cuentan con menos posibilidades de formación y sus miembros tienen que aceptar con frecuencia los trabajos menos cualificados. El EUMC alerta además que las mujeres musulmanas que llevan el velo son las que tienen más problemas para conseguir un empleo.
Además, los alumnos de familias musulmanas tiene unos niveles de alfabetización muy inferiores a los de otros alumnos, y los jóvenes musulmanes se enfrentan a barreras para ascender en la escala social.
FRENTE NEGRO
En lo que se refiere a España, el informe lamenta que no haya estadísticas sobre crímenes racistas. Esa lista incluye, entre otros, la detención en Cataluña en enero de 2005 de miembros de un grupo llamado Frente Negro, que cometió ataques a mezquitas. El informe también se hace eco del asesinato, en febrero del 2005, de de un obrero marroquí en El Ejido (Almería).