Celebran la laicidad de la sociedad y lamentan los «llamamientos con sabor a cruzada»
Una treintena de sacerdotes de la diócesis de Valencia ha firmado un documento en el que expresa su preocupación por «la frecuente beligerancia y combatividad de muchos obispos españoles ante la reformas» anunciadas por el Gobierno. Los capellanes, integrantes del denominado Grup de Rectors del Dissabte (en referencia al día en que suelen reunirse), afirman que estas actitudes «recuerdan situaciones neoconfesionales y estilos anticonciliares».
Estos sacerdotes valencianos -titulares la mayoría de parroquias populares y obreras- elaboraron el pasado día 18 el citado escrito, el cual supone una toma de posición ante la postura de la Conferencia Episcopal, que ha realizado varias campañas contra medidas y proyectos del Gobierno de Rodríguez Zapatero. El documento viene a evidenciar la existencia de una oposición en el propio seno de la Iglesia a la actitud dominante en la jerarquía eclesiástica.
En este sentido, el grupo de párrocos lamenta «el abandono de aquella sabiduría que sabe de reconciliación, de diálogo», para «implantar en su lugar la confrontación sistemática, la oposición frontal a un gobierno legítimo, la división entre los creyentes y los llamamientos con sabor a cruzada».
Frente a ello, estos curas celebran «la laicidad de la sociedad española», que reclaman como principio que debe regir la relación entre la religión y el espacio público. Interpretan este concepto como el reconocimiento del pluralismo de creencias y convicciones y lo contraponen al intento de imponer, «en nombre del Evangelio», una cosmovisión como «la única verdadera». En su opinión, asimismo, la laicidad se aleja del «laicismo que niega el valor del hecho religioso». Así, proponen avanzar en la construcción de una sociedad laica y no sólo de un Estado laico.
En esa línea crítica con la postura dominante en el episcopado español, estos capellanes denuncian la «identificación de la jerarquía y muchos sectores del catolicismo español con posiciones partidistas que, con la pretensión de ser la única postura eclesial, fortalecen las posiciones conservadoras».