A pesar del pequeño tamaño de la cercana localidad de Las Quintanillas -al estar separada de la capital por una veintena de kilómetros y contar con apenas 300 habitantes repartidos entre la localidad y sus pedanías Villarmentero y Santa María de Tajadura-, los responsables municipales llevan años dando pasos para hacer de ella un atractivo lugar tanto para propios como para extraños y visitantes.
Si bien en 2015 el Consistorio llevó a cabo mejoras del edificio del Ayuntamiento y reestructuró su interior para dar cabida a una biblioteca, el objetivo de este año «es la recuperación de la ermita local», remarca el alcalde de la localidad, Eduardo Munguía.
Denominada como iglesia de la Expectación de Nuestra Señora, «pero también de forma más popular como de la ermita de la Virgen de la O», el alcalde explica que ya se ha pedido la elaboración de un informe para realizar trabajos «que ayuden a subsanar los daños que sufre este lugar tan querido por los lugareños, y sobre todo evitar que vayan a más», explica.
Labor de redacción del proyecto en la que está ya inmerso el arquitecto municipal, Luis Ángel López, quien detalla que «se centrará sobre todo en la sustitución de la cubierta, dado el avanzado deterioro en que está, y por ser éste su punto débil», comenta el experto.
Aunque ya ha sido objeto de pequeñas intervenciones puntuales en otras ocasiones, esta vez el Ayuntamiento también con el apoyo de la Junta parroquial, pretende realizar una reparación global del tejado. La obra está prevista realizarla por fases siendo inicialmente unos 20.000 euros el coste estimado para realizar las dos primeras, con una duración de unos tres meses.
Si bien el templo data de los siglos X-XI, «hoy no se mantiene en pie ningún elemento original, debido a las continuas reformas llevada a cabo en estos siglos». Orígenes que, como añade, quedan patentes a raíz del texto de un pergamino con caracteres visigóticos del siglo X u XI, encontrado en la iglesia de Nuestra Señora de la O. «Custodiado hoy en el Archivo Diocesano, es el mejor aval que acredita la remota antigüedad de este lugar», comenta el redactor del proyecto.