Oaxaca se convierte en la sexta entidad federativa en desechar esta propuesta del Congreso federal, pues antes lo hicieron Coahuila, Morelos, Baja California, Michoacán y Zacatecas.
La LXI Legislatura del Estado, en sesión ordinaria efectuada este miércoles, rechazó por mayoría de votos (25) la minuta con proyecto de decreto enviada por el Senado de la República para modificar la redacción del primer párrafo del Artículo 24 de la Constitución federal relacionado con la libertad de culto.
Con ello, Oaxaca se convierte en la sexta entidad federativa en desechar esta propuesta del Congreso federal, pues antes lo hicieron Coahuila, Morelos, Baja California, Michoacán y Zacatecas.
Además, la LXI aprobó con 35 votos el dictamen con proyecto de decreto por el que se reforma el Artículo 40 de la Carta Magna para incluir la declaratoria que ratifica la laicidad del Estado Mexicano.
El rechazo a la modificación del primer párrafo del Artículo 24 de la Constitución federal se dio luego de un amplio debate en el que participaron diputados del PAN, PRD, PRI, PT y Movimiento Ciudadano (MC).
En tribuna, el diputado panista Luis de Guadalupe Ramírez Martínez, consideró que la libertad religiosa es un derecho fundamental del individuo y lo laico no significa anticlerical.
Sostuvo que no es lo mismo libertad de culto que libertad religiosa, ya que esta última está relacionada con la libertad de conciencia.
Su compañero de partido, Guadalupe Isaac Rodríguez Soto, aclaró los conceptos del Estado laico, y señaló que no constituyen una forma de gobierno.
En tanto, el legislador Emmanuel Alejandro López Jarquín, coordinador de la fracción parlamentaria del PRD, indicó que los integrantes de su bancada aprobarían el decreto de la Comisión Permanente de Estudios Constitucionales del Congreso del Estado que rechaza la modificación propuesta por el Senado de la República.
Mientras, el legislador priista Maximino Vargas Betanzos, en nombre de su grupo parlamentario, manifestó su “rechazo frontal a la pretendida reforma al Artículo 24 Constitucional, y subrayó que está en manos de las legislaturas locales impedir que se consume esta regresión histórica, esta contrarreforma que nos haría perder la esencia de las libertades públicas en México”.
Dijo que no se puede permitir que bajo el ropaje de cambios de redacción se altere el significado profundo de la libertad de creencias y el Estado laico, una herencia de la reforma juarista que nutrió el andamiaje constitucional que hoy sostiene al edificio de la República.
A su vez, la coordinadora del grupo parlamentario del PT en la LXI Legislatura del Estado, Hita Beatriz Ortiz Silva, advirtió que quienes están empeñados en reformar la Constitución federal para favorecer a los intereses clericales, “no hacen otra cosa más que sepultar nuestra historia”.
Por su parte, su compañero de bancada, Flavio Sosa Villavicencio, señaló que la reforma implicaba graves riesgos para las libertades ganadas por el pueblo en sus luchas históricas, incluida de manera muy importante la libertad de credo, “y que tan sólo en la Revolución nos costó un millón de muertos”.
“Aprobar la minuta que nos envía el Senado sería una traición a la Patria, una traición a nuestra historia y a la sangre que corrió para escribirla”, expresó el Legislador petista, en tanto que a los congresos estatales que aún no han votado la minuta del Senado les pidió rechazarla.
Finalmente, la diputada del MC, Margarita García García, consideró que debe haber un criterio unánime para no aprobar la reforma constitucional, porque “pone en peligro el Estado mexicano y atenta contra las instituciones públicas”.
Manifestó que la laicidad significa el respeto por parte del poder público, la libertad de conciencia, la no discriminación y el pleno reconocimiento de la pluralidad que se expresa en una sociedad democrática.
En cuanto a la reforma al Artículo 40 de la Constitución federal aprobada, la redacción quedó de la siguiente manera: “Es voluntad del pueblo mexicano constituirse en una República representativa, democrática, federal, compuesta de Estados libres y soberanos en todo lo concerniente a su régimen interior, pero unidos en una Federación establecida según los principios de esta ley fundamental”.
