La mujer se negó a mostrarle el rostro a dos policías que le pidieron que se identificase en Novara, en el norte de Italia, donde se aprobó una normativa que prohíbe cubrirse el rostro en lugares públicos
Una mujer musulmana deberá pagar una multa de casi 500 euros por presentarse cubierta con el burka en una oficina de correos de Novara, en el norte de Italia, donde a principios de este año fue aprobada una normativa que prohíbe cubrirse el rostro en los lugares públicos.
La mujer, que tiene 26 años y es de origen tunecino, acudió a la oficina de correos acompañada de su marido y tapada con el burka. Cuando dos agentes de la Policía le pidieron que les mostrara el rostro para poder identificarla, ella se negó porque eran hombres, de modo que éstos tuvieron que llamar a una compañera para que pudiera proceder a la identificación. La mujer tendrá que pagar ahora una multa de casi 500 euros a causa de la nueva normativa que sanciona a las personas que acudan a los lugares públicos con el rostro cubierto.
Entrevistado por el diario Corriere della Sera, el marido, Ben Salah Braim, de 36 años, aseguró que a partir de ahora su mujer no tendrá más remedio que quedarse en casa. A la pregunta sobre si conocía la nueva normativa, el hombre respondió que sí, pero pensaba que, "al menos el viernes", que es el único día que su mujer sale de casa para ir a la mezquita, podría salir con el burka. Aun con todo, aseguró que él respeta la ordenanza del alcalde ya que sabe que "no va en contra" de su religión. "Sé que en Italia está prohibido para todos", pero el problema está en que a su mujer "no la pueden mirar otros hombres", explicó.