Los acusados son Nicola Corradi y Horacio Corbacho. También el administrativo Armando Gómez. Podrían darles 50 años de prisión.
El caso Provolo de Mendoza está próximo a juicio oral, después de dos años y ocho meses de investigación. Está previsto que el debate comience la primera semana de agosto cuando salgan a la luz los detalles del espanto que las víctimas relatan puertas adentro del colegio católico. Los curas Nicola Corradi (83), Horacio Corbacho (59) y el administrativo Armando Gómez (49) están acusados de abusos sexuales, corrupción de menores y maltratos de los niños sordos alojados en la institución de Luján de Cuyo. La suma de las penas puede alcanzar los 50 años de prisión, de acuerdo con la imputación.
El fiscal Gustavo Stroppiana los responsabiliza de 43 hechos y aportará el testimonio de 13 víctimas de abusos sexuales, de entre 4 y 17 años. Un cuarto acusado, José Luis Ojeda (41), fue declarado inimputable, por tratarse de un discapacitado mental, que también fue víctima de la corrupción de Corradi, desde que tenía 3 años. El quinto acusado, Jorge Bordón (63) , se declaró culpable el año pasado, en un juicio abreviado. Bordón, conocido como el monaguillo, era cuidador del albergue de varones del colegio. Confesó ser el responsable de 11 abusos sexuales a niños alojados en el colegio y fue condenado a 10 años en prisión .
El 27 de noviembre de 2016, llegó a la Justicia mendocina la denuncia contra las curas y la gestión de los derechos de los abusos sexuales en el interior del instituto Antonio Provolo. Fue la punta del ovillo de otras denuncias y nuevas imputaciones. En otros dos expedientes, que aún esperan la mayor parte de un juicio, están acusadas dos monjas y el personal administrativo y docente del Provolo. En total, hay 14 personas de la sede que serán enjuiciadas.
