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Los Legionarios de Cristo ponen en marcha una campaña «Apadrina un cura»

La locura de apadrinar a un cura

COMENTARIO: Nada tendríamos que decir desde el Observatorio del Laicismo ante esta noticia, pues se trata de una iniciativa de una organización, muy libre de realizar las campañas que estime convenientes. Al igual que los demás. Sin embargo su mensaje está lleno de hipocresía, precisamente los Legionarios de Cristo, cuyo fundador ha sido objeto del mayor escándalo financiero, sexual y pederasta de toda la iglesia, que ha actuado con la connivencia del Vaticano, que ahora se presente como defensor de las primitivas comunidades cristianas parece cuando menos sorprendente. Que nos digan que los sacerdotes son amigos cuando miles de ellos han abusado de la confianza de quienes les dejanban a sus hijos en parroquias, seminarios, conventos,… para abusar de ellos sexualmente, parece indigno.  Que nos digan que no se puede imaginar un mundo sin curas, es cierto, los curas han sido históricamente, y no hay que remontarse a la Edad Media y las guerras de religión o las cruzadas, sino al siglo XX o XXI para ver su connivencia con los regímenes fascistas y las dictaduras, con el robo de bebés en hospitales, que han acallado las injusticias, la violencia a la mujer, que han pertubado la mente y la conciencia de millones de adolescentes y de jóvenes a quienes les predicaban una moral sexual que ellos no cumplían,… cuando han sido, en general, los grandes aliados del poder económico y del conservadurismo, cuando han practicado el clericalismo en la política,… y han buscado los privilegios simbólicos, financieros, económicos, educativos,…

Ciertamente que un mundo sin curas hubiese sido muy deseable para que la humanidad hubiese podido gozar de felicidad y paz.


 

Cuando pensé por primera vez en la posibilidad de crear una campaña para apadrinar sacerdotes diocesanos, algunos amigos me dijeron que les parecía una auténtica locura. "¿Por qué?", les pregunté, "¿acaso no vemos a diario campañas que apoyan el apadrinamiento de niños, e incluso de animales o bosques?". Son todas ellas campañas muy dignas y positivas, pero ¿es que acaso el apadrinamiento de sacerdotes no lo es?

Además, si estar locos es ser más creativos para alcanzar el reto de conseguir miles de padrinos que con 6 euros al mes, garanticen la formación de 354 seminaristas diocesanos; entonces sí, tienen razón, esta campaña es una auténtica locura.

Al símbolo que utilizamos para esta iniciativa lo llamamos Cristianito. Hemos querido dar vida al pez que representaba a las primeras comunidades cristianas: personas que fueron perseguidas, marginadas y acosadas por la fe que abrazaban, la fe cristiana; tal y como ocurre ahora.

Los primeros cristianos lograron seguir adelante gracias a su fuerte sentido de unión y comunidad, y es a ese mismo espíritu al que ahora apelo con esta campaña.        

Un cura, un amigo

Si meditamos durante unos instantes sobre la labor tan importante que los sacerdotes han hecho por la humanidad a lo largo de los tiempos, enseguida veremos que el legado que nos han dejado, y que nos siguen dejando, es inmenso.

Los hospitales, las universidades, los monasterios, los geriátricos, los orfanatos o los comedores públicos son solo una muestra de esta gran labor. Desde siempre la Iglesia se ha desvivido por los más necesitados. Hoy más que nunca, los sacerdotes se han colocado en primera línea para hacer frente a la dura crisis que está azotando especialmente a España.

Pero no olvidemos otro aspecto aún más importante que los sacerdotes han venido haciendo a lo largo de la historia: la ayuda espiritual brindada a cada uno de nosotros. Mediante los sacramentos, los sacerdotes están a nuestro lado desde nuestro nacimiento hasta nuestra muerte. Siempre están ahí para ayudarnos y dispuestos a renovar nuestros corazones.

¿Te imaginas un mundo sin ellos?

Sin duda, sería un mundo con más angustia, caos, desesperanza y desamor. 

Todo lo dicho nos sitúa ante una clara conclusión: si hubiese más  sacerdotes, habría más luz en España  y en el mundo.

Apadrina a un cura

Una vocación es una llamada directa y personal que Dios le hace al hombre. Así, si queremos nuevas vocaciones, lo que podemos hacer es pedírselas a Dios mediante la oración.

Lo que tambien está en nuestras manos es ayudar económicamente a quienes ya han sido elegidos por Él, para garantizarles su sostenimiento y una excelente preparación sacerdotal.

Por eso le propongo que apadrine un cura con 6 euros al mes.

El efecto multiplicador de su apadrinamiento

Un sacerdote, a lo largo de su vida, ayuda a miles de personas. Por consiguiente, quien apadrine un cura estará ayudando a muchísima gente.

Pero, ¿y si le dijera que el futuro sacerdote que usted apadrine formará a cientos de seminaristas en un seminario diocesano? Entonces ya no serán miles, sino cientos de miles las personas a las que estará ayudando con sus 6 euros.

Esto es a lo que yo llamo el verdadero efecto multiplicador.

Unos seminarios muy especiales

Hace 20 años, el entonces Papa Juan Pablo II encargó a los Legionarios de Cristo la fundación de los seminarios Pontificios Maria Mater Ecclesiae para la preparación de seminaristas –seleccionados por sus respectivos obispos– que, una vez ordenados, seconvirtieran en profesores y formadores en seminarios diocesanos de todo el mundo. 

6 euros al mes

La formación y el mantenimiento de cada uno de los 354 seminaristas del Pontificio Maria Mater Ecclesiae tiene un coste de 600 € al mes. Esta cantidad incluye alojamiento, alimentación, material de estudio, profesores, formadores, transporte, etc.

Actualmente, sus familias y las diócesis de donde proceden estos seminaristas contribuyen, con gran esfuerzo, con el 9,37% de los costes de manutención y formación. El 90,63% restante lo tenemos que conseguir con iniciativas como esta. 

En los tiempos que corren, sin duda es difícil que alguien pueda aportar una beca mensual de 600 €. Sin embargo, si muchas personas responden a esta petición de domiciliar solo 6 € al mes podremos asegurar la formación de todos ellos. 

Para lograr este enorme reto de “La locura de apadrinar a un cura” hemos creado la página www.apadrinuncura.com, una web que seguro dará que hablar. Le invito a que la visite.

Muchas gracias. Le encomiendo en mis oraciones.

Atentamente: 

P.Jesus Maria Delgado, L.C.

Director Territorial – Congregación de los Legionarios de Cristo

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