En primaria e infantil, el 81% de los niños cursan religión. En secundaria, a partir de los 12 años, sólo uno de cada tres, el 31%.
Los estudiantes de Valladolid de los colegios públicos reciben clases de religión mientras los que toman las decisiones en casa son los padres. Llegados a la adolescencia y una vez que los propios jóvenes empiezan a elegir sus optativas, abandonan la asignatura. Así lo demuestran los datos facilitados por el Obispado y que la Consejería de Educación negó a 20 minutos. Las cifras indican que mientras el 81% de los alumnos de primaria e infantil de la ciudad optan por dar religión, sólo uno de cada tres chicos en secundaria y bachillerato lo hace (el 31%).
Tras eliminar el BUP
Sin embargo, los responsables de enseñanza del Obispado no creen que el motivo sea que los jóvenes pasen de la religión. «Esto comenzó a pasar al retirarse el anterior bachillerato, el llamado BUP. Entonces, cuando había como alternativa ética, más del 70% prefería la religión. El problema es que ahora la otra opción que tienen es no dar nada y los chicos optan por ello», explica Mariano García.
Por su parte, desde la Asociación Escuela Laica de Valladolid indican que los datos reflejan que hay una evolución en la sociedad. Los jóvenes ya no piensan como lo hacen sus padres o sus abuelos, afirman.
Nueva asignatura
Por otro lado, y aunque restan flecos por pulir, el próximo año existirá una nueva asignatura obligatoria: educación para la ciudadanía.
Al final, habrá dos alternativas
El Ministerio de Educación y Ciencia ya se ha decidido. Para el próximo curso la asignatura de religión será voluntaria y quienes no la cursen «tendrán la debida atención educativa», indicaron. En secundaria existirá una alternativa que permitirá conocer la historia y cultura de las religiones, y para quienes no quieran recibir clases de religión, se mantendrá la «atención educativa». En primaria, la asignatura sólo será de tipo confesional. Para quien no lo desee, el centro deberá garantizar una buena atención.
A favor y en contra
Mariano García. Delegado de enseñanza del obispado.
«Queremos una alternativa seria a la religión»
«Queremos una alternativa de verdad a la religión para evitar que estén en inferioridad. Un estudio comparado de las distintas religiones y de su influencia. Respecto a la creación de la asignatura de la educación para la ciudadanía, creemos que debe centrarse en los valores que marca la Constitución, derechos y deberes, no en los que decida quien gobierne».
Fernando Pastor. Miembro Asociación Escuela Laica.
«La religión debe darse fuera del horario lectivo».
«Los obispos quieren una alternativa. El problema es que no se puede imponer a nadie que haga algo para que otros puedan dar su clase. Además, ésta no debería existir en los centros educativos y menos en horario lectivo. De la educación para la ciudadanía decimos que estamos en contra de cualquier adoctrinamiento, y esta asignatura puede manipularse fácil».