John Jeffrey será responsable de la diócesis londinense de Southwark. El sector más conservador habla de ruptura
La Iglesia de Inglaterra está a punto de nombrar a Jeffrey John, un sacerdote gay casado, obispo de la diócesis de Southwark en Londres. La decisión se tomará entre hoy y mañana en al reunión del Comité de Nombramientos de la Corona y cuenta con el visto bueno del Arzobispo de Canterbury, Rowan Williams. Sin embargo, el paso amenaza con ampliar las diferencias entre los sectores liberal y conservador de los anglicanos. Algunos hablan de ruptura.
John no es el primero. De hecho, el anterior obispo, Mervyn Stockwod, también era gay, pero el sector más tradicionalista considera un problema el hecho de que esté casado por lo civil. John fue nombrado obispo de reading en 2003, pero las presiones tradicionalistas obligaron a que Williams le pidiera dejar el cargo.
Esta mañana, en declaraciones a la BBC, el canónigo Chirs Sudgens dijo que una de las razones por las que los conservadores se oponen al nombramiento es "porque está casado por lo civil y la Iglesia de Inglaterra no cree que las uniones civiles sean equivalentes al matrimonio".
"Si esto sigue adelante, va a haber un gran número de clérigos y congregaciones que busquen ayuda episcopal fuera del Reino Unido", dijo Sudgens.
"Excesivo liberalismo"
Liberales y tradicionalistas anglicanos llevan envueltos en una agria polémica durante años por el ordenamiento de mujeres y homosexuales como sacerdotes. En septiembre del año pasado, el Vaticano anunció que aceptaría en la doctrina de Roma a aquellos sacerdotes anglicanos que se opongan a esa medida, lo que ha ayudado a aumentar las diferencias.
La organización Anglican Mainstream, que se opone a la consagración de homosexuales como obispos, ha pedido a los fieles que recen para que el nuevo titular de Soutwark sea "alguien cuya vida y doctrina sean totalmente concordes con las enseñanzas de la Iglesia".
La semana pasada, el obispo Azad Marshall, de la diócesis de Irán, y el arzobispo Henry Orombi, de Uganda, dimitieron del comité permanente de la Comunión Anglicana en protesta por lo que consideran un excesivo liberalismo en la dirección de esa Iglesia.