La cantante estadounidense Beyoncé Knowles ha aplazado el concierto que tenía previsto ofrecer en el estadio nacional de Kuala Lumpur el domingo próximo, un acontecimiento que había despertado fuertes protestas entre radicales islámicos, según anunciaron ayer los organizadores.
Las presentaciones de artistas extranjeros son frecuentemente motivo de protesta por parte del Partido Islámico Pan-Malasio (PAS), cuyo sector joven ya logró que Beyoncé cancelara un concierto en 2007 en esta nación, mayoritariamente musulmana, de 27 millones de habitantes.
La compañía de entretenimiento local Marctensia, organizadora del acontecimiento, dijo en un breve comunicado publicado en una web que el concierto I am… de Beyoncé, que estaba programado para el 25 de octubre como parte de su gira mundial, se realizaría en otra fecha a definir.
"La postergación es exclusivamente decisión de la artista y no tiene nada que ver con otras razones externas", dijeron los organizadores del concierto en la declaración.
No se dieron a conocer más razones sobre la postergación del concierto, alimentando así la hipótesis de que han sido las presiones de los islamistas las que han provocado la suspensión de Beyoncé.
Marctensia señaló que una nueva fecha para el concierto será anunciada "en el corto plazo" y una declaración de los representantes de Beyoncé sería divulgada durante la semana.
boicot a lavigne El sector joven de PAS ya intentó el año pasado con sus presiones suspender una actuación de la cantante canadiense Avril Lavigne en Malasia.
A inicios de este mes, Malasia prohibió en un principio la presencia de musulmanes en un concierto de la banda de hip hop estadounidense The Black Eyed Peas auspiciada por Guinness, una de las marcas del principal grupo de bebidas alcohólicas Diageo.
La orden de prohibición fue finalmente retirada, aunque un alto funcionario señaló al respecto que dependía del "juicio" de cada persona decidir si asistía al evento.
La imagen de Malasia como un país musulmán moderado fue seriamente afectada por una reciente sentencia contra una famosa modelo, que fue condenada a recibir azotes por el mero hecho de ser sorprendida bebiendo cerveza en un ligar público.
