José Mazuelos, el obispo de la Diócesis de Canarias (que incluye a las islas orientales del Archipiélago), ha criticado las «muy desafortunadas» manifestaciones sobre el caso hechas por el padre Báez, y ha afirmado que se tomarán las medidas que haya que tomar contra él, pero sin especificar cuáles ni cuándo: «Es la gota que ha colmado el vaso», se ha limitado a decir.
En una entrevista concedida al programa de RTVC Trópico Distópico y recogida por Canarias Ahora, Mazuelos ha calificado de «barbaridades» las palabras de Báez y ha reconocido que se trata de un sacerdote «que está contra la doctrina de la Iglesia». El obispo ha pedido calma y paciencia y ha explicado que «estas cosas llevan tiempo», pero que la Iglesia «va a actuar».
El obispo ha asegurado que «no hay motivo ni justificación» para defender este crimen vicario y recordó que ya el pasado domingo la Diócesis de Canarias emitió un comunicado en el que dejaba claro que se desmarcaba de las afirmaciones del párroco. Sin embargo, salvo reprobarlas, poco más se ha hecho y Báez sigue dando misa en su parroquia de Gran Canaria.
La Plataforma Feminista 8M Tenerife exige el cese del padre Báez y ve «insuficiente» la posición de la Diócesis
Por su parte, la Plataforma Feminista 8M Tenerife exige el cese de funciones del padre Báez, párroco de Gran Canaria, tras sus «indignas palabras» en las que justificaba la violencia vicaria ejercida por Tomás Gimeno con sus hijas, Anna y Olivia.
El colectivo pide en un comunicado el «desprecio de toda la sociedad» ante las «incomprensibles» palabras de Báez y ve «insuficiente» la reacción del Obispado de la Diócesis de Canarias pues, aunque se desmarca de sus declaraciones, su compromiso contra la violencia de género es «insuficiente».
En esa línea, detalla que «durante años, multitud de homilías han sido el espacio donde se promueven en las mujeres actitudes de sumisión y de resignación, actitudes contrarias a la autonomía y la libertad, al ejercicio de sus derechos», y ahora, aunque el Obispado reconoce la violencia vicaria, «no menciona que es una forma de violencia contra las mujeres».
La plataforma lamenta también que haya personas «con poder» -en referencia al padre Báez- que puedan difundir ideas «tan dañinas» y cree que no es suficiente «expresar el horror» por el asesinato de Anna y Olivia sino que hay que desmontar el «machismo» que hay detrás de la sociedad.
