El Cabildo Catedralicio prevé trasladar las taquillas del monumento al Palacio Episcopal, sede del Obispado de Córdoba
El 1,5 millones de turistas que al año visitan el monumento tendrán que pasar obligatoriamente por el Obispado para comprar su entrada
El proyecto, pendiente de la aprobación de Patrimonio, también contempla la creación de un Centro de Interpretación de la Mezquita-Catedral dentro del propio Obispado
El Cabildo Catedralicio de Córdoba – que gestiona la Mezquita Catedral- tiene preparado un proyecto por el cual trasladaría las taquillas de venta de entradas de la Mezquita-Catedral al Palacio Episcopal, sede del Obispado de Córdoba. De esa manera, el millón y medio de turistas que recibe el monumento cada año tendrían que pasar obligatoriamente para adquirir sus tickets de manera presencial por la sede eclesiástica, edificio situado en una de las calles que conforman el perímetro de la Mezquita-Catedral.
Según consta en el documento, el proyecto también prevé la construcción de un Centro de Interpretación del monumento en el propio Palacio Episcopal, pendiente de una remodelación que llevará a la instalación de este centro dentro del Obispado, como paso previo a la visita turística al monumento propiamente dicho.
El proyecto, que ya cuenta con el visto bueno de los técnicos de la Gerencia Municipal de Urbanismo de Córdoba y de la Delegación Provincial de Cultura, debe ahora pasar a la Comisión Provincial de Patrimonio de la Junta de Andalucía, que será la encargada de otorgarle la aprobación definitiva para que el Obispado pueda iniciar las obras oportunas.
Así, las taquillas para la venta de las entradas de la Mezquita-catedral quedarán enmarcadas dentro del Palacio Episcopal, desapareciendo de su ubicación actual, el Patio de los Naranjos del emblemático monumento que actualmente goza de acceso libre para cualquier persona, estando la entrada restringida sólo para la visita al interior del edificio.
Ingresos íntegros
Las entradas para acceder a la Mezquita-Catedral tanto en horario diurno como nocturno –de un lado- y a la Torre Campanario (antiguo alminar) –por otro- han sido objeto de polémica ya que sus ingresos íntegros van a parar a manos de la Iglesia. El dinero de los tickets ni se declara ni se tributa al estar exenta la Iglesia de publicarlos oficialmente y del abono de impuestos, algo que ha sido criticado por la Plataforma Mezquita-Catedral Patrimonio de Todos y Córdoba Laica, entre otros. Los cálculos –ya que el Cabildo no ofrece información pública sobre dichos ingresos- estiman que anualmente la Iglesia ingresa alrededor de 13 millones de euros por las visitas de turistas al monumento.
Cabe recordar que la apropiación de la Mezquita-Catedral por parte de la Iglesia se inició con su inmatriculación en el Registro de la Propiedad en el año 2006, por un coste de 30 euros, sin tener título de dominio sobre el monumento y gracias a un artículo de época franquista que mantenía la antigua Ley Hipotecaria reformada por el expresidente del Gobierno José María Aznar.
A partir de ese momento, la Iglesia inició un proceso por el que hizo desaparecer del nombre del monumento el término Mezquita y solamente lo denominaba Catedral, nomenclatura que aparecía en cuantos carteles, documentos y folletos turísticos emitía el Cabildo –incluso llegó a desaparecer de Google Maps-, pese a que el nombre oficial del monumento según aprobó el Ayuntamiento de la ciudad era Mezquita-Catedral. No ha sido hasta este mismo año 2016 cuando la Iglesia ha recuperado ambos términos y desde hace unos meses denomina oficialmente al edificio como Conjunto Monumental Mezquita-Catedral de Córdoba.