La cesión se hace con el fin de ser restaurado para uso cultural y social
Según ha sabido la Cadena SER, emisora que ha accedido al documento de cesión, la Diócesis de Palencia ha cedido el uso de la Iglesia de Santa Cruz de la Zarza al Ayuntamiento de Ribas de Campos para proceder a su restauración y posterior dedicación a fines culturales y sociales, según se recoge en el convenio de acuerdo que han firmado ambas partes y que se hará público en próximas fechas. Recordemos que la Diócesis ha mantenido un largo litigio por la propiedad del edificio religioso con una empresa privada, Sociedad Anónima del Ucieza, que llegó a utilizar parte de las instalaciones como establo.
Ha sido una de las primeras acciones del Obispo de la Diócesis, Manuel Herrero Fernández. Al poco tiempo de ser consagrado, comunicó al Ayuntamiento de Ribas de Campos a través de su Alcalde, Julio Martínez Llorente, la decisión de firmar el acuerdo. El documento ha sido avalado además por el Pleno del Ayuntamiento de Ribas de Campos. Los siguientes pasos serán la redacción de un proyecto y consiguiente búsqueda de fondos entre las administraciones para recuperar el valioso edificio en avanzado estado de deterioro. Santa Cruz de la Zarza figura en la Lista Roja del Patrimonio de la Asociación Europa Nostra.
En la cesión de uso se expresa que la Diócesis de Palencia es propietaria de la iglesia de Santa Cruz de la Zarza, templo que se encuentra desde hace muchos años sin dedicación al culto. La Diócesis reconoce «que no tiene necesidad ni proyecto alguno de uso sobre el templo«. También expresa que el Ayuntamiento de Ribas de Campos, interesado en promover la cultura, «ha solicitado el uso de dicho inmueble a fin de proceder a su restauración y posterior dedicación con fines de carácter social y cultural.Estos fines, no descartan en ningún caso su posible uso también para el culto católico en un futuro. A partir de ahí se recogen las condiciones en las que se produce la cesión.
Se trata de un paso clave para recuperar un templo que ha sido noticia reiterada por el recorrido que ha tenido en los tribunales. La Sociedad Anónima del Ucieza adquirió en 1979 una finca de regadío que incluía la iglesia del antiguo monasterio cisterciense del siglo XII de Santa Cruz de la Zarza, una casa, dos norias, un corral y un molino, e inscribió la compra en el registro de Astudillo. El Obispado los inscribió en el mismo registro a su nombre en 1994 como un «terreno urbano» compuesto por la iglesia, la sacristía y la sala capitular, que formaron parte del antiguo monasterio. El asunto acabó en los juzgados y la justicia española acabó dando la razón a la Diócesis a la que otorgó la propiedad del edificio. Sin embargo, esta decisión fue cuestionada por Estrasburgo.