La Conferencia Episcopal de Holanda pidió hoy perdón por los abusos sexuales cometidos por religiosos a miles de menores desde 1945 a 1981.
Condenamos una vez más enérgicamente toda forma de abuso sexual. No hay espacio en el seno de la Iglesia para ese tipo de prácticas. No puede haber titubeos en eso, consignó un comunicado emitido por la cúpula católica de Países Bajos.
Poco antes, un informe del ex ministro holandés de Educación Wim Deetman indicó que entre 10 mil y 20 mil jóvenes sufrieron abusos sexuales en centros de educación católica entre esos años.
Deetman aseguró que el problema de los delitos de índole sexual estaba en la agenda de las reuniones episcopales desde la década del 40.
De acuerdo con la comisión designada para investigar los hechos, la Iglesia Católica conocía tales situaciones, pero fracasó en enfrentar el problema por miedo al escándalo.
Los autores no son los únicos que deben ser censurados, las autoridades religiosas no reaccionaron adecuadamente y tampoco privilegiaron los intereses de las víctimas, admitieron los obispos.
Hasta el momento, se han reconocido a unos 800 presuntos perpetradores sexuales, 105 de los cuales todavía viven.
Entre los abusos se incluyen desde tocamientos o roces deshonestos hasta penetraciones, describe el informe.
No obstante, la comisión Deetman reconoció también que los abusos sexuales no eran más frecuentes en instituciones católicas que en centros similares dirigidos por otros grupos.
De hecho, los abusos sexuales a menores son algo extendido en la sociedad holandesa, indicó el reporte.
