La ley de libertad religiosa que prepara el Gobierno tratará los símbolos cristianos y avanzará en la laicidad estatal
El anteproyecto de modificación de la ley de libertad religiosa abordará la cuestión de los símbolos religiosos y avanzará en la laicidad del Estado, según anunció ayer la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Fernández de la Vega fue preguntada por esa reforma, la retirada de crucifijos de los colegios y la sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos sobre la supresión de símbolos religiosos en los centros escolares.
Aunque no dio fecha para su presentación, la vicepresidenta reiteró que es un "compromiso" del Gobierno la revisión de la ley orgánica de libertad de conciencia y religiosa para "adecuarla" al pluralismo de la sociedad y a la jurisprudencia del Tribunal Constitucional.
"Es una norma que pretende avanzar en la laicidad que la Constitución otorga a nuestro Estado y en el reconocimiento y protección de los derechos de todos y cada uno de lo ciudadanos, independientemente de que practiquen o no una religión y sea cual sea ésta", dijo.
Insistió en que se garantizarán los derechos de todos y "la neutralidad de las instituciones", en línea con los principios de la Constitución, de su artículo 16, con la jurisprudencia constitucional y del Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
Sobre los símbolos religiosos, el anteproyecto "abordará esa cuestión y será el momento en que tendremos el tiempo para debatirla".
Preguntada concretamente por la sentencia del Tribunal Europeo que ampara a una madre italiana que había pedido la retirada de un crucifijo de un colegio público, en qué medida afectaba a España, respondió: "Estamos estudiando la sentencia, y recogeremos en el proyecto de ley la incidencia que esa sentencia pueda tener en nuestro ordenamiento de cara a esa regulación que estamos tratando de abordar, y de acuerdo con nuestros principios constitucionales, con la jurisprudencia del Tribunal Constitucional y con la jurisprudencia de Tribunal de Estrasburgo, que respetamos y acatamos".
Por su parte, el ministro de Educación, Ángel Gabilondo, no quiso pronunciarse, pero dijo que la redacción de la Constitución es "muy inteligente" porque vincula "las creencias religiosas a la situación social en cada momento", y señaló que España es un país plural desde el punto de vista religioso.
El ministro también explicó que la Ley de Libertad Religiosa tendrá el mismo procedimiento de elaboración que otras normas, de modo que habrá conversaciones con los grupos parlamentarios para buscar un texto de consenso.