«Encuentran aquí personas sin bautizar», lamentan los obispos
La Conferencia Episcopal Española (CEE) subrayó ayer con una imagen impactante hasta qué punto le inquieta la fe decreciente de la sociedad española. "Están llegando misioneros de otros lugares para ayudarnos en la evangelización de esta tierra, porque han cambiado mucho las cosas en muy poco tiempo", lamentó el obispo de Jaén y actual presidente de la Comisión Episcopal de Misiones, Ramón del Hoyo López. En una especie de mundo al revés, de cuando los conquistadores iban de la mano de capellanes a América, Del Hoyo explicó que misioneros nacidos en otros países llegan hoy a España y en ella encuentran "personas que no están bautizadas y personas que no conocen el Evangelio".
De país exportador de misioneros, a importador. La falta de vocaciones es motivo de alarma para la Conferencia Episcopal Española. Ese sería el resumen. El obispo Del Hoyo, no obstante, fue más allá y abor-
dó también su preocupación por "el riesgo real de que se considere a los misioneros como cooperantes". Teme que la verdadera labor de la iglesia quede oculta entre la gran cantidad de proyectos que impulsan las oenegés, algunas de ellas vinculadas a sectores del catolicismo.
LA PRIORIDAD, EVANGELIZAR
Los religiosos –aceptó– "también atienden" a los más desfavorecidos, pero puntualizó de inmediato que "ese no es su objetivo fundamental, sino que es la evangelización".
