Según nos consta, en una escuela concertada de carácter religioso de Rubí (Barcelona), el colegio Regina Carmeli, obligan a rezar a los alumnos en horario escolar, al parecer, antes de las clases, bajo amenaza de castigo en caso de no cumplir dicha obligación.
Resulta sorprendente, un colegio costeado por todos y que mantiene rituales religiosos.
Desgraciadamente esta es la situación que provoca la existencia de colegios religiosos concertados. Por eo el verdadero problema está en la financiación de los mismos por parte del Estado.
Pero si aceptan esa financiación, que admitan que en ese colegio puede escolarizarse cualquier persona y que deben respetar su libertad de conciencia.