Los socialistas parten de su apuesta por la «laicidad» para «descartar» apoyar la petición de Caballas pero sin oponerse a que, fuera del currículo y del horario escolar y si fomenta «el entendimiento», se ofrezca formación en la confesión musulmana en los institutos atendiendo a la realidad social de Ceuta.
El secretario general del PSOE de Ceuta, Manuel Hernández, ha querido dejar claro a última hora de la mañana de este lunes que los socialistas «no apoyarán» la propuesta de Caballas para que el Pleno inste al Ministerio a ofrecer la asignatura de Religión Islámica en los institutos, tal y como se hace actualmente en Secundaria con la Católica. Ello no implica que vayan a votar en contra.
Tal y como ha dicho en rueda de prensa, su posición de partida sobre confesiones y Educación es que esta última debe ser «laica». El líder de los socialistas ceutíes, Manuel Hernández, ha explicado que ambos principios se pueden compaginar atendiendo a las «características especiales» de Ceuta y al análisis que se haga de la misma.
«Tenemos que vivir con nuestra realidad y nos parece loable el planteamiento de Caballas en el sentido de que el Gobierno estudie la posibilidad de atender esa petición, cuya idoneidad nosotros tendríamos que estudiar si responde a una demanda social mayoritaria y si promueve el entendimiento pero siempre ofrecieron la Religión fuera del currículo y del horario escolar», ha resumido «en base a lo que dice nuestra posición política federal y la Constitución».
El último programa electoral del PSOE apostó por «promover una escuela pública laica donde no quepa la integración de enseñanzas confesionales, ni en el currículum ni en el horario escolar», y por avanzar hacia «la incorporación de la enseñanza cultural sobre el hecho religioso en términos de integración y convivencia, como parte de nuestro patrimonio cultural, evitando, por ignorancia, los riesgos de los fundamentalismos».
La Constitución obliga a los poderes públicos a «garantizar el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones» y en la LOMCE, que le ha devuelto peso como materia evaluable, se prescribe que l as Administraciones educativas debe asegurar también «que, al inicio del curso, los padres, madres o tutores legales y en su caso el alumnado puedan manifestar su voluntad de que éstos reciban o no reciban enseñanzas de religión».
El Acuerdo del Estado con la Comisión Islámica de 1992 dice que, de acuerdo con la legislación, «se garantiza a los alumnos musulmanes, a sus padres y a los órganos escolares de gobierno que lo soliciten, el ejercicio del derecho de los primeros a recibir enseñanza religiosa islámica en los centros docentes públicos y privados concertados, siempre que, en cuanto a estos últimos, el ejercicio de aquel derecho no entre en contradicción con el carácter propio del centro, en los niveles de educación infantil, educación primaria y educación secundaria».