Francisco habla por primera vez de cifras para los resarcimientos, un punto clave que la Iglesia española aún no ha aclarado, y deja en evidencia la mayoría de las compensaciones pagadas hasta ahora
El Papa ha hablado por primera vez con claridad de uno de los asuntos que la Iglesia más evita a la hora de afrontar la pederastia del clero: el dinero de las indemnizaciones que debe pagar. Y ha subido mucho el listón de lo que, en su opinión, deberían desembolsar los obispos, pues ha dicho que, por ejemplo, 50.000 euros, le parece “una cantidad demasiado baja, no es una cosa que sirve”. Es una valoración que deja en evidencia la mayoría de las compensaciones conocidas pagadas hasta ahora en la Iglesia española, muy lejos de esa cifra: una media de 10.000 euros, según los cálculos de este diario en base a las sentencias y casos conocidos. También en la propia orden del Papa, los jesuitas, que en España tienen tres tipos de tarifas, según la gravedad de la agresión, que solo van de 5.000 a 15.000 euros como máximo. Además, esta advertencia del pontífice llega justo en el momento en que la Conferencia Episcopal (CEE) está estudiando por primera vez cómo abonar indemnizaciones y su cuantía, un detalle que aún no ha querido revelar. En las iglesias de otros países tampoco se ha alcanzado ese importe. Según los cálculos de este periódico sobre los pagos en seis países, se ha abonado a cada víctima una media de 35.000 euros.