COMENTARIO: La Iglesia católica, ahora con el papa Francisco a la cabeza, persevera en su alineamiento con los golpistas en la guerra civil española.
El papa Francisco ha firmado el decreto que reconoce el martirio de 115 españoles asesinados durante la Guerra Civil española (1936-1939).
La oficina de prensa del Vaticano comunicó hoy la aprobación del «decreto de martirio» de José Álvarez-Benavides y de la Torre y de otros 114 compañeros asesinados por «odio a la fe» entre 1936 y 1938.
Álvarez-Benavides nació en Málaga en 1865 y murió en 1936 en Almería, donde ejercía como decano del capítulo de la catedral.
El pontífice reconoció su martirio y el de sus compañeros con un decreto firmado durante un encuentro mantenido esta mañana con el cardenal Angelo Amato, prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos.
También se aprobaron las «virtudes heroicas» del padre Vicente Garrido Pastor, sacerdote diocesano fundador del Instituto Secular de las Obreras de la Cruz, nacido en Valencia (este) el 12 de noviembre de 1896 y fallecido el 16 de abril de 1975.
Por último, el papa Francisco también aprobó las «virtudes heroicas» de María Elisea Oliver Molina, fundadora de la Congregación de las Hermanas de la Virgen María del Monte Carmelo (carmelitas), nacida el 9 de julio de 1869 y muerta el 17 de septiembre de 1931.
El padre Vicente y María Elisea Oliver serán considerados desde ahora «venerables» y para que puedan ser beatificados deberá aprobarse un milagro gracias a su intercesión, mientras que para que sean proclamados santos será necesario un segundo milagro.