El arzobispo de Pamplona, Fernando Sebastián, anima a los católicos a votar a la extrema derecha
Al hilo de la propuesta para designar como cardenal a Fernando Sebastián, recordamos las propuestas de extrema derecha de este obispo, que ahora el "progre" Francisco incluirá en el colegio cardenalicio. Reprodcimos esta noticia publicada por 20 minutos en mayo de 2007, cuando era arzobispo titular de Pamplona, hoy emérito.
El máximo responsable de los católicos en Navarra, el arzobispo de Pamplona y Obispo de Tudela, Fernando Sebastián Aguilar, afirmó en un documento titulado Situación actual de la Iglesia, algunas orientaciones prácticas, que los cristianos deben votar a partidos de extrema derecha como Falange Española de las JONS y Alternativa Española.
En la web redescristianas.net , se informa de que el 17 de marzo de 2007 en León, el señor Arzobispo "ofreció una serie de interesantes orientaciones prácticas para los católicos respecto a cómo debíamos actuar en política, y entre ellas incluyó una referencia a FE-JONS como uno de los partidos a tener en cuenta y que hay que apoyar".
Partidos católicos y derechistas
En el punto ocho del tercer capítulo, denominado Intervención de los católicos en los partidos no confesionales, apoya a los "partidos políticos que quieren ser fieles a la doctrina social de la Iglesia en su totalidad, como por ejemplo Comunión Tradicionalista Católica, Alternativa Española, Tercio Católico de Acción Política, Falange Española de las JONS.
Todos ellos son partidos poco tenidos en consideración. Tienen un valor testimonial que puede justificar un voto. No tienen muchas probabilidades de influir de manera efectiva en la vida política, aunque sí podrían llegar a entrar en alianzas impotantes si consiguiesen el apoyo suficiente de los ciudadanos católicos".
Continúa diciendo que "es legítimo que los católicos voten a los partidos laicos, pero se hará así, si dichos partidos reconocen la ley moral natural como normal moral para el tratamiento de los temas políticos".
Por eso, "los católicos no deben intervenir en aquellos partidos que expresamente nieguen la existencia de una ley moral objetiva que se debe respetar en la vida política o se manifiesten contrarios a la libertad religiosa de los ciudadanos en general".
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