Y dice que la católica es “una religión poco respetada por el poder”
El amor a la patria nos lo manda el cuarto mandamiento de la ley de Dios. Nuestra patria es España y nuestra tierra Andalucía, lo más grande de España“. Ese es el inicio de la carta del Demetrio Fernández, obispo de Córdoba, remitida a la comunidad católica de su diócesis. También aprovecha la masiva para censurar que los políticos creyentes está dejando en un segundo plano sus convicciones religiosas en su labor institucional. Asimismo mantiene que la religión católica está siendo “relegada”.
Un Estado que “favorece todo lo que va contra Dios”
El obispo se muestra sorprendido que se haya pasado de un Estado aconfesional a otro en el que “se favorece todo lo que va contra Dios o contra la religión católica. Me alegro de que otras religiones sean delicadamente respetadas, pero los católicos en España y en Andalucía no somos una minoría étnica, sino el 92% de la población. Aquí pasa algo raro”.
Poco respeto desde el poder a la religión católica
Asegura en su carta que los políticos católicos y practicantes, cuando acceden a los cargos “prefieren dejar a un lado sus convicciones para mantenerse en una neutralidad que ofende a la inmensa mayoría de la población”. Cree que la religión católica se ha convertido en una religión poco respetada desde el poder…a veces parece que la única religión no respetable sea la católica”.