Las comunidades islámicas instan al Ejecutivo a agilizar los trámites con las Comunidades Autónomas, mientras que el Gobierno reclama el listado de profesores.
El Gobierno socialista no podrá cumplir su compromiso de incrementar el número de profesores de Religión islámica y ampliar la enseñanza de esta asignatura a toda España antes de que finalice este trimestre, tal y como se comprometió el Ministerio de Educación el pasado mes de noviembre. Dicha propuesta, que establecía una asignación presupuestaria para la contratación de 20 nuevos profesores de esta confesión religiosa -hasta la fecha, únicamente existe otra veintena en Ceuta, Melilla, además de alguno en Andalucía-, designados por las Comunidades Islámicas y financiados por la Administración educativa, tiene pocas posibilidades de salir adelante durante este curso, lo que ha suscitado quejas de los representantes musulmanes en España.
Como se recordará, la directora general de Asuntos Religiosos, Mercedes Rico Carabias, anunció el verano pasado la creación de nuevas plazas docentes para profesores de Religión islámica, dentro de la intención del Ejecutivo socialista de cumplir los Acuerdos suscritos en 1992 con esta confesión religiosa, considerada «de notorio arraigo». La intención de Justicia provocó un conato de crisis en el Gobierno, puesto que desde Educación se acusó al departamento dirigido por Juan Fernando López Aguilar de «tomar decisiones que no le corresponden».
Pese a ello, el pasado mes de noviembre, Educación y la Comisión Islámica Española acordaron establecer un «plan piloto», consistente en la creación de 20 nuevas plazas de este profesorado, que se implantarían en Andalucía, La Rioja, País Vasco, Canarias y Aragón, antes de que finalizase el presente curso. La intención del Gobierno era llegar hasta el centenar de profesores -cifra apuntada por las entidades musulmanas como la más adecuada- en el curso 2005-2006.
Ejecutivo y Comisión Islámica quedaron emplazadas para una reunión de la Comisión Mixta, prevista para este mes de febrero, en la que, de un lado, los representantes islámicos presentarían un listado de profesores capacitados para impartir esta enseñanza y, del otro, la Administración llevaría la consulta realizada a las Comunidades Autónomas correspondientes. No obstante, y según ha podido saber ABC, no sólo no se ha producido dicha reunión, sino que ni siquiera se ha puesto fecha para la misma.
Setenta y cuatro mil alumnos
Desde Educación se argumenta que «estamos a la espera de que las Comunidades Autonómicas nos indiquen cuáles son sus necesidades educativas en esta materias», al tiempo que apuntan que «la Comunidad Islámica de España todavía no nos ha presentado la lista». Por el contrario, el secretario general de la citada comisión, Riay Tatary, aseguró a ABC que «ya hemos presentado la lista, pero quedaron en llamarnos y todavía no lo han hecho». Tanto el Gobierno como las entidades islámicas ven «prácticamente imposible» que la anunciada ampliación del profesorado de Islam se pueda llevar a cabo antes de que finalice este trimestre, y «muy difícil» que sea una realidad durante este curso.
En lo que sí coinciden ambos es en las dificultades planteadas por algunas comunidades autónomas, como Madrid, Cataluña o la Comunidad Valenciana -donde existe una mayor implantación de las comunidades islámicas, que en principio habían sido elegidas como receptoras del nuevo profesorado. De este modo, se optó por Canarias, Aragón, La Rioja, País Vasco y Andalucía para acoger las nuevas plazas. En esta última, incluso se había hablado de las ciudades de Almería, Granada, Sevilla, Algeciras y Málaga.
Profesores itinerantes
En opinión de Tatary, en la actualidad existen 74.000 alumnos, en todos los niveles educativos, que demandan la enseñanza de la religión musulmana en el territorio nacional. Para este representante musulmán, serían necesarios unos 300 docentes de esta materia en el conjunto del Estado. No obstante, con la veintena de plazas que se prevén, las comunidades islámicas han planteado crear la figura de los «profesores itinerantes», que impartirían las clases de Religión islámica en colegios de diferentes pueblos siguiendo un circuito asignado.
Por su parte, el otro secretario general de la Comunidad Islámica Española, Mansur Escudero, mostró su extrañeza ante el retraso en la planificación de estos docentes. «Si ya hay unas plazas presupuestadas y no hay objección por parte de las Comunidades Autónomas, no entiendo este atraso». Escudero asegura que, al menos desde la Junta de Andalucía, «se están dando todas las facilidades».
Sobre el listado de profesores, Escudero coincide con Tatary al indicar que «ya se ha presentado», si bien matiza que «deberíamos saber antes a qué centros van a ser enviados, porque no podemos designar a un profesor andaluz que luego tenga que ir a Canarias». No obstante, el representante musulmán quiso destacar la «voluntad clara de acuerdo» del Ministerio de Justicia, promotora de la iniciativa que después ha asumido el Ministerio de Educación.