El organismo rechaza el grueso de las enmiendas de los padres católicos
El pleno del Consejo Escolar del Estado, organismo en el que están representadas todas las organizaciones sociales, reiteró ayer su petición de que la enseñanza religiosa salga del ámbito escolar y que, de mantenerse, en ningún caso exista una materia alternativa para quienes no deseen la clase confesional. La propuesta, que considera que esta materia es contraria a la aconfesionalidad del Estado recogida en la Constitución, figura en el informe sobre el anteproyecto de ley orgánica de educación (LOE), aprobado por mayoría.
El informe contó con la oposición de la confederación católica de padres CONCAPA y el Sindicato de Estudiantes (SE), que considera que los alumnos están infrarrepresentados en el pleno del organismo y se reduce su derecho a la huelga.
El organismo, que seguirá discutiendo hoy las 1.825 enmiendas presentadas al proyecto por asociaciones afines al PP, ha ampliado las razones de no discriminación a la hora de admitir alumnos a las derivadas del "sexo u orientación sexual".
El informe apoya la nueva materia de Educación para la Ciudadanía que promueve el Ministerio de Educación, destinada fundamentalmente a explicar el funcionamiento de las instituciones democráticas. También pide una ley de financiación de la reforma, la disminución de la ratio de alumnos por aula y que la enseñanza infantil de tres a seis años sea obligatoria.
Para el presidente de la Concapa, Luis Carbonel, la LOE es "un paso atrás" y una "revancha política" del PSOE. Carbonel interpretó que no se recoge ni una medida importante contra el fracaso escolar y auguró que una ley sin consenso durará "muy poco".
La presidenta del Consejo Escolar del Estado, Marta Mata, confió en que las organizaciones de la enseñanza lleguen a un pacto antes de que el gobierno remita el anteproyecto al Congreso de los Diputados en las próximas semanas.
