Una pelea entre magrebís y vecinos de Sisco provoca que el alcalde de la localidad decida prohibir esta prenda de baño que cubre todo el cuerpo de la mujer
Un incidente en una playa de Córcega ha vuelto a poner de manifiesto la tensión que reina en esta isla francesa delMediterráneo entre parte de la población local y la comunidad de inmigrantes musulmanes, agravada tras los atentados yihadista que ha sufrido Francia. La batalla campallibrada el pasado sábado en la playa de la norteña localidad deSisco por un ‘burkini’ ha motivado que el alcalde de este municipio, el socialista Ange-Pierre Vironi, haya decidio prohibir el uso de esta prenda de baño, que cubre todo el cuerpo de la mujer. “Lo que pretendo es que las comunidades puedan vivir juntas y en armonía. Necesitamos paz y concordia en la isla”, ha dicho Vironi.
Los graves incidentes, que acabaron con 5 heridos y destrozos materiales, se precipitaron, según algunos testigos, cuando unos turistas fotografiaron a una mujer que vestía ‘burkini”. Un grupo de personas de origen magrebí empezó a increpar y a tirar piedras a los visitantes y a unos adolescelentes corsos que observaban la escena. A la refriega se unieron padres de los niños y otros vecinos.
Esta es, al menos, la versión que dió, megáfono en mano, una de las adolescentes ante un grupo de 500 personas que al día siguiente, el domingo, se concentraron en la comisaría de la ciudad de Bastia, también al norte, para protestar contra la comunidad magrebí. Los manifestantes gritaron “¡A las armas¡” y se dirigieron hacia el barrio de Lupino, de donde procedían los magrebís. Según explicó la niña, en el momento del incidente, el grupo de musulmanes gritaron “Alá Akbar (Dios es grande), os vamos a matar. Somos del 36 de Lupino y no tenemos miedo de vosotros”. La niña aseguró además que uno de los magrebís iba armado con una hacha y que otro utilizó un arpón.
Las autoridades han abierto una investigación para saber si la versión de la adolescente, de 16 años, se ajusta a la realidad. De momento no se conoce la versión del grupo de magrebís.
ORATORIO MUSULMÁM
Con la prohibición del ‘burkini’, el alcalde de Sisco se ha unido a las de otras dos localidades francesas, Cannes y Villeneuve-Loubet, ambas de la Costa Azul, que semanas atrás prohibieron esta prenda que “manifiesta de forma ostentosa una pertenencia religiosa”, según el decreto de la alcaldía de Cannes.
“Cuando Francia y los lugares de culto religioso son actualmente objetivo de ataques terroristas, (el ‘burkini’ puede provocar disturbios del orden público”, decía también la nota. El director general de servicios del Ayuntamiento de Cannes, Thierry Migoule, fue más lejos y, en declaraciones a Francetv info, aseguró que el “burkini” es una “señal de adhesión al yihadismo” y plantea además “problemas de higiene”.
La Liga de los Derechos Humanos (LDH) y el Colectivo contra la Islamofobia en Francia (CCIF) han criticado la decisión de prohibir esta prenda.
Varios incidentes en los que se han visto implicados miembros de lacomunidad musulmana han sucedido últimamente en Córcega. El pasado mes de diciembre, un oratorio musulmán fue saqueado después de que se produjera un ataque contra el departamento de bomberos perpetrado, supuestamente, por jóvenes árabes,
El mes pasado, la asamblea de Córcega adoptó una resolución pidiendo al Gobierno de París cerrar todos los lugares de culto musulmanes radicales en la isla después de que el FLNC, un grupo independentista, amenazase a los “islamistas radicales” de “responder con determinación ” a cualquier ataque.
