La Asociación Sierense de Amigos de la Música, dirigida por Alfonso Sánchez Peña, encabezó la procesión hasta la Plaza de Les Campes –donde antiguamente se ubicaba la capilla de la Virgen del Carmen–, allí se hizo parada para cantarle la salve a la virgen y, retomar, tras la denuncia de una vecina del año pasado, la traca de voladores en honor a la patrona. Eso sí, este año se tiraron un poco más lejos.
Ángel García participó este año, por primera vez como alcalde, en la celebración religiosa, lo hizo junto a la pregonera de la fiesta, Alicia Vallina, y una representación de los ediles de la Corporación Municipal.
Vallina reconoció estar viviendo la fiesta «de otra manera». Hacía dos años que no venía a La Pola por el Carmín. La pregonera no se lo pensó dos veces y bailó la Danza Prima a la llegada al templo, antes de que la imagen regresase a su morada santa, donde descansa todo el año. Serguidamente, Enrique Meoro, presidente de la Asociación Amigos del Roble, fue el maestro de ceremonias de la puya’l ramu. El dinero recaudado se destina para la parroquia. Además, aprovechando la presencia de la Agrupación Folclórica Surco y Arado, de Gáldar (Gran Canaria) –invitada al Festival de Folclore María Campos- se pudo disfrutar de una muestra del folclore de la isla.